Tics, muletillas, dicción, apariencia y, claro también contenido, son las principales preocupaciones por estos días de los candidatos a La Moneda y de sus asesores más cercanos, de cara al primer debate televisivo que se realizará el próximo miércoles 23 de septiembre en los estudios de Televisión Nacional.
Lejos de la trascendencia del mítico primer debate televisivo de la historia de Estados Unidos, también en septiembre, pero de 1960, ése que catapultó a John Kennedy por sobre un tembloroso Richard Nixon, este encuentro promete dar espacios igualitarios a los cinco postulantes inscritos en el Servicio Electoral.
El formato del debate, por el mismo interés de dar trato igualitario a los candidatos, significó una rigidez y tiempos limitados, lo que preocupa a algunos de los postulantes.
En el comando del candidato de la Coalición por el Cambio, Sebastián Piñera, lo que más preocupa son los tics que posee el abanderado, como mover el cuello de la camisa o pestañear seguidamente, pero estiman que le favorecerá la rapidez mental y su capacidad de resumir en frases cortas sus ideas fuerza.
El senador RN y miembro del comité estratégico del comando de Piñera, Andrés Allamand, expresó además sus temores por el eventual interés de los otros 4 candidatos por intentar demoler a quien lidera las encuestas.
Las críticas al formato del espacio, que calificó como enumeración de ideas y no debate, también llegaron por parte de la periodista Pamela Jiles, una de las más cercanas al candidato del Movimiento Amplio Social, Alejandro Navarro.
Jiles estima que su abanderado tiene todo a su favor, en especial por la novedad de su mensaje, que prácticamente no ha sido recogido por los medios tradicionales.
Sin farándula, ni preparaciones con cámaras de televisión, el candidato presidencial del Juntos Podemos, Jorge Arrate, asegura que aunque ha recibido consejos de algunos cercanos, se ha dedicado sólo a estudiar su programa de Gobierno, para dar una batalla de las ideas.
En el comando del candidato independiente Marco Enríquez-Ominami apuestan por la vasta experiencia televisiva tanto del propio abanderado como de su esposa, Karen Doggenweiller.
A pesar de ello, el vocero de la candidatura independiente y experto comunicacional, Marcelo Trivelli, reconoció que están puliendo una debilidad de Enríquez-Ominami, su dicción, debido a que habla demasiado rápido.
De los actuales candidatos sólo 2 han protagonizado antes debates televisivos: Sebastián Piñera y el postulante de la Concertación, Eduardo Frei, pero a pesar de esa experiencia son probablemente los que más tiempo y recursos han dedicado a prepararse para ese momento.
En sus preparativos el senador democratacristiano ha contado con la asesoría de la periodista Patricia Politzer y del cineasta Ricardo Larraín.
Según detalló el senador DC y encargado territorial del comando de Frei, Jorge Pizarro, apuntarán a fortalecer la idea de experiencia y confianza que genera el ex Presidente.
Si estos preparativos lograron captar su interés, entonces recuerde que el debate es pasado mañana por TVN a las 22 horas, se extenderá por 90 minutos y será moderado por el periodista Alejandro Guillier, y por supuesto, luego conozca todos los entretelones y análisis en Radio Bío-Bío.
