Al menos 6 soldados italianos de la OTAN y 10 civiles afganos murieron el jueves en un atentado suicida en Kabul, uno de los más sangrientos cometidos contra las tropas occidentales en Afganistán, reivindicado por los talibanes.

La explosión tuvo lugar poco después de mediodía a unos 1,5 kilómetros de la embajada estadounidense, en la concurrida carretera que lleva al aeropuerto, y destruyó un vehículo de la Fuerza Internacional de Asistencia a la Seguridad de la OTAN (ISAF).

“6 soldados italianos murieron y otros 3 resultaron heridos”, anunció el ministro de Defensa italiano.

Los testigos aseguraron que quedaron dañados vehículos con la bandera italiana y el logo de la ISAF y que la explosión destruyó también varias tiendas.

“Pensé que el día se había convertido en noche. Cuando volví, durante unos minutos no podía ver nada. Entonces vi a un hombre tumbado en el asfalto, le faltaba la cabeza”, indicó un Sawad.

El Ministro italiano de Defensa, Ignazio La Russa, indicó en el Senado en Roma que 10 paracaidistas se desplazaban en 2 blindados cuando fueron atacados por un suicida, aparentemente en un vehículo blanco de marca Toyota.

“Desgraciadamente tengo que confirmar la pérdida de 6 vidas humanas del regimiento de paracaidistas”, dijo. Italia es el sexto país con más tropas desplegadas en Afganistán, con cerca de 3.250 soldados.

En el Vaticano, el papa Benedicto XVI expresó su dolor por este horrible atentado y expresó su solidaridad con las familias.

El cuerpo de un soldado de la ISAF yacía en la carretera y los restos de otros 3 cuerpos fueron rescatados de los escombros de un tanque, destruido por la bomba que hizo temblar los edificios de Kabul, dijo un periodista de la AFP.

“En el atentado con coche bomba, 10 civiles murieron y otros 55 civiles resultaron heridos”, dijo a la AFP el portavoz del ministerio del Interior afgano, Zemarai Bashary. “Fue un atentado suicida con coche bomba que tenían como objetivo la fuerza internacional”, precisó.

Los talibanes, que llevan a cabo una insurgencia contra el gobierno afgano, respaldado por los militares occidentales, revindicaron rápidamente el ataque.

El portavoz Zabihulá Mujahid dijo a la AFP por teléfono que la milicia llevó a cabo un atentado suicida.

El presidente Hamid Karzai, que según los resultados preliminares logró una amplia mayoría en las pasadas elecciones presidenciales, condenó el ataque como “antiislámico” y lo consideró una “barbarie”.

Kabul, sede de un gran número de representantes, tropas y ayudantes occidentales, se enfrenta a una creciente ola de ataques suicidas revindicados por los talibanes. (AFP)