El gobierno de Colombia rechazó este domingo una declaración del ministro venezolano de Relaciones Interiores y Justicia, Tareck El Aissami, según las cuales el servicio de inteligencia colombiano (DAS), se habría convertido en un cártel de la droga.

Consideró que esos comentarios “constituyen una intromisión en los asuntos internos de Colombia y los rechazó por “inaceptables”, al tiempo que los recibió como “una ofensa a la institucionalidad colombiana”, indicó un breve comunicado expedido por el Ministerio de Relaciones Exteriores.

Posteriormente, el ministro colombiano de Defensa, Gabriel Silva, calificó como “política” y “falsa” la declaración de su similar venezolano, con la que se pretende “esconder la realidad del incremento desaforado del narcotráfico en Venezuela”.

Silva además dijo en declaraciones a periodistas tras un acto público que “nos preocupa inmensamente que existan pueblos muriéndose de hambre, sin abastecimiento, con inflaciones desaforadas, sin empleo, y mientras tanto se gastan miles de millones de dólares en cohetes y aviones”, en una alusión tácita al vecino país.

El presidente venezolano, Hugo Chávez, anunció el viernes la compra a Rusia de cohetes de mediano alcance, que aseguró fueron adquiridos para la “defensa” y no para “atacar a nadie”.

Por su parte, el ministro venezolano dijo el sábado que el DAS (Departamento Administrativo de Seguridad), y la agencia estadounidense antidrogas, DEA, se han convertido en “cárteles importantes del narcotráfico”.

“Nosotros insistimos que las autoridades colombianas no colaboran en la lucha contra el tráfico ilícito de drogas”, dijo El Aissami a la televisión estatal VTV, al anunciar el decomiso de 1.450 kilos de marihuana procedentes de Colombia.

“Esta droga sale desde el territorio colombiano con la mayor impunidad (…). Estas incautaciones evidencian que hay una clara complicidad, y que además, el DAS y la DEA se han convertido en cárteles importantes del narcotráfico”, agregó.

Venezuela cesó su cooperación con la DEA en 2006.

(AFP).