El Ministro de Relaciones Exteriores, Mariano Fernández, aseguró que el pre acuerdo existente entre Chile y Bolivia para el uso del manantial Silala es “equilibrado”, y aclaró que no ha recibido comunicación del gobierno boliviano sobre posibles modificaciones.

“Tenemos un pre acuerdo que consideramos equilibrado y adecuado, y si Bolivia tiene una opinión distinta, tendremos que ver qué desea presentar como modificación o como propuesta distinta y lo estudiaremos”, dijo Fernández.

El pre acuerdo establece un compromiso de Chile a pagar por el 50% del uso de las aguas, mientras que se realizan estudios que precisen la cantidad que nace en Bolivia o territorio chileno.

Sin embargo, la prensa local dijo que el canciller boliviano David Choquehuanca demandaría la propiedad de Bolivia sobre el Silala y el pago de la llamada “deuda histórica” de empresas chilenas que usaron el caudal en los últimos 100 años.

Ambos argumentos son rechazados por Chile, pero Choquehuanca habría adquirido el compromiso de incorporar estas modificaciones ante pedidos de grupos cívicos de Potosí, ciudad donde nace el manantial.

Bolivia ha aclarado que firmará un acuerdo final con Chile una vez que encuentre consenso entre las organizaciones sociales de su país, con las que lleva adelante un proceso de consulta.

Para Chile las aguas del Silala son de cauce natural, mientras que Bolivia sostiene que nacen de varios manantiales que fueron canalizados artificialmente en el siglo XIX para abastecer a la extinta empresa ferrocarrilera Bolivian Railway, cuando esa región formaba parte de Bolivia.

Este manantial es vital para Chile, pues surte a las ciudades del desértico norte chileno y a la mina de cobre de Chuquicamata, la mayor del mundo a cielo abierto.

Las negociaciones sobre el Silala forman parte de un acuerdo de 13 puntos que Bolivia y Chile pactaron en 2006, que además comprende el reclamo boliviano de recuperar costas sobre el Pacífico, cuyo acceso perdió tras una guerra a fines del siglo XIX. (AFP)