Los conservadores iraníes, incluyendo al presidente del Parlamento, Alí Larijani, rechazaron las acusaciones de que manifestantes antigubernamentales hubiesen sido violados en la cárcel, como afirmó el líder reformista Mehdi Karubi, a quien lanzaron una severa advertencia.

“Si Karubi tiene pruebas sobre abusos sexuales y casos de violaciones, que informe a la presidencia del Parlamento para que investiguemos”, dijo Larijani.

En tanto, el gobierno alemán anunció que había convocado al embajador de Irán para exigir “la liberación inmediata de los prisioneros” arrestados después de las manifestaciones, incluyendo a la francesa Clotilde Reiss, en una iniciativa coordinada con sus socios europeos.

(AFP)