Por cerca de una hora y media en La Moneda, la presidenta Michelle Bachelet se reunió con su homólogo colombiano, Álvaro Uribe Vélez, quien busca apoyo para su acuerdo militar con Estados Unidos.

Uribe busca respaldo a su decisión de permitir a efectivos militares de ese país ocupar siete instalaciones castrenses en Colombia, luego que Ecuador cerrara la base militar norteamericana en el puerto de Manta.
Tras el encuentro, y sin ahondar en lo tratado, el mandatario colombiano sólo se limitó a dar un saludo de carácter protocolar.

La visita del único líder conservador del concierto continental no pasó indiferente ante los ojos de sus detractores en Chile. Es así como un centenar de carabineros de fuerzas especiales y de civil reforzaron la seguridad en torno al Palacio de La Moneda con motivo de su fugaz visita, quienes detuvieron a una quincena de personas que protestaban por la presencia de Uribe en territorio nacional.

Antes de la llegada de Uribe a la sede del Ejecutivo, miembros del comando del candidato del Juntos Podemos Más, Jorge Arrate, entregaban una carta en la puerta de La Moneda pidiendo a la Presidenta declarar persona non grata al mandatario colombiano, según lo expresado por el encargado de temas internacionales del Partido Comunista y jefe del comando de Arrate, Juan Andrés Lagos.