El presidente depuesto de Honduras, Manuel Zelaya, sostuvo en México que revertir el golpe de estado del 28 de junio en su país constituye un reto para la comunidad internacional.

Zelaya fue recibido por el presidente mexicano Felipe Calderón con honores de estado al inicio de una visita de trabajo de 24 horas.

El destituido mandatario hondureño reafirmó su disposición a “seguir utilizando métodos pacíficos” para hallar una salida a la crisis política en Honduras.

Calderón reiteró su apoyo a las gestiones que lleva adelante su colega de Costa Rica, Oscar Arias, para hallar una salida negociada a la situación institucional en Honduras .

En tanto, las autoridades policiales hondureñas admitieron que un militar mató ayer a una persona en la zona fronteriza con Nicaragua, la única del país bajo toque de queda, al sobrepasar un vehículo los retenes que bloquean las carreteras.