La Organización de los Estados Americanos sostendrá hoy dos reuniones en Washington para tratar la crisis en Honduras, donde el gobierno de facto de Roberto Micheletti soporta la presión internacional para aceptar una salida bajo la mediación del presidente costarricense Oscar Arias, que presentó una propuesta que contempla la restitución de Manuel Zelaya.

Micheletti calificó de “intromisión” que el embajador estadounidense en Tegucigalpa, Hugo Llorens, se reuniera ayer con Zelaya en Managua, y dijo que “bajo ninguna circunstancia” éste volverá al poder.
Ayer, policías y soldados reprimieron duramente una manifestación de partidarios de Zelaya que habían bloqueado una ruta que conecta la capital con el norte del país, y golpearon a algunos periodistas que cubrían los hechos.

Un diplomático extranjero en Tegucigalpa dijo a la Agencia France Presse que Micheletti ordenó reprimir los bloqueos de ruta por las quejas de los empresarios, que dicen que les ocasionan pérdidas millonarias.