El caso del pequeño, que fue detenido por la policía de investigaciones cuando conducía un auto robado, y que además tiene un nutrido prontuario, ha generado conmoción en el Gobierno. El Subsecretario de Justicia, Patricio Rossende, dijo que “no van a desistir” en los “esfuerzos por rescatar” al niño.

El menor estaba acompañado de dos adolescentes, de 14 y 16 años, y conducía un auto robado cuando personal de la brigada del crimen de la policía de investigaciones los visualizó.

Cisarro comenzó una carrera que culminó cuando los menores chocaron con un árbol, momento en que fueron detenidos y puestos a disposición del Tribunal de Garantía por el delito de receptación.

En el caso de Cisarro, y tal como explicó el defensor público de esta causa, por su edad éste quedó con una medida de protección y fue internado en el Centro de Tránsito y Diagnóstico, de Pudahuel, dependiente de Servicio Nacional de Menores, Sename, por 30 días.

En cuanto a sus acompañantes, ambos fueron sometidos a un procedimiento abreviado y el tribunal los condenó a 40 y 60 horas de trabajo comunitario.

Una pena que según el fiscal, Alejandro Osorio, responde al delito cometido.

En cuanto a la internación de Cisarro el Ministro de Justicia dijo que es imposible “meter preso a un niño de 10 años.

En la misma línea se manifestó el Subsecretario del Interior, Patricio Rossende, quien dijo que el gobierno seguira en su intentó por “rescatar al niño”.

A su corta edad, Cisarro cuenta con una abultada historia delictual que se traduce en 16 detenciones y su participación en almenos cinco atracos, además es sindicado como el menor que apuñaló en una pierna al economista y decano de la Universidad Adolfo Ibáñez, Leonidas Montes, en octubre de 2008.