El grupo yihadista Estado Islámico (EI) se enfrentaba el martes a un doble ataque terrestre y aéreo contra sus feudos en Irak y Siria, con un apoyo masivo de la coalición internacional liderada por Estados Unidos.

Un día después del lanzamiento de una operación en la ciudad iraquí de Faluya, el martes era la provincia de Raqa, donde se encuentra la “capital” del EI en Siria, la que estaba en el punto de mira de los ataques.

Estas ofensivas son las más importantes desde que, en 2014, el EI autoproclamara el “califato”, que se extiende a caballo entre los dos países. En Irak, las tropas federales efectúan estas operaciones. En Siria, es la coalición árabokurda de las Fuerzas Democráticas Sirias (FDS) la que las lleva a cabo.

“Las FDS comenzaron su ofensiva para liberar el norte de Raqa. Nuestro objetivo no es liberar la ciudad de Raqa, sólo el norte de la provincia”, declaró a la AFP Talal Sello, portavoz de las FDS.

“Hemos recibido cobertura aérea de la coalición” internacional liderada por Estados Unidos, agregó.

Una fuente de las Unidades de Protección del Pueblo Kurdo (YPG) indicó por su parte a la AFP que sus fuerzas “habían recibido armas estadounidenses y que tropas estadounidenses participaban en los combates en tierra”.

“Varios miles” de combatientes del FDS “lanzaron esta mañana operaciones para controlar el norte de Raqa” y poder así “ejercer presión en la ciudad”, confirmó el coronel Steve Warren, portavoz del ejército estadounidense.

El Observatorio Sirio de Derechos Humanos (OSDH) declaró que se produjeron “bombardeos intensos de la coalición”, “en el norte de la ciudad de Raqa y en la ciudad”. “Al menos 22 yihadistas murieron”, según la oenegé.

Los combatientes del EI “utilizan los civiles como escudos. Se ven en los mismos edificios” de la ciudad, afirmó a la AFP Abdel Aziz al Hamza, cofundador del grupo “Raqqa is Being Slaughtered Silently”.

- Terminar con el ‘mito’ del EI -

La reconquista de esta ciudad siria, junto con Faluya y Mosul en Irak, es el principal objetivo de la coalición internacional contra el grupo yihadista.

Está claro que si Estados Unidos quiere eliminar al EI, se le tiene que atacar en varios frentes a la vez“, explica a la AFP Fabrice Balanche, experto de Siria en el Washington Institute. “Cortar la carretera entre Raqa y Mosul no es difícil hoy en día. Esto acabaría con el mito del EI transnacional”, agrega.

Después del anuncio de la ofensiva contra Raqa, el ministro ruso de Relaciones Exteriores, Serguei Lavrov, anunció que Rusia estaba dispuesta a coordinarse con la coalición árabokurda y Estados Unidos para echar a los yihadistas del EI de Raqa.

Por otro lado, en el oeste de Irak, cerca de la frontera siria, las fuerzas iraquíes estrechaban el martes el cerco en torno a Faluya, otro emblemático baluarte yihadista situado a apenas 50 km de Bagdad.

El primer ministro iraquí Haider al Abadi anunció el martes, menos de un día después del inicio de la ofensiva, que las fuerzas gubernamentales habían tomado Garma, uno de las últimas localidades que permiten a Faluya mantener un contacto con el exterior.

“Las fuerzas federales avanzaron por la mañana temprano hacia el este de Faluya, desde tres direcciones”, dijo a la AFP un teniente general de la policía, Read Shakir Jawdat.

Para el experto iraquí Hisham al Hashemi, “Faluya es muy importante para el EI” porque si pierde esta ciudad “sólo le quedarán zonas desérticas hasta la frontera siria, así como las localidades de Rawa, Ana y Qaim” en la provincia de Anbar, y “sus feudos se reducirán a Hawija y Mosul en Irak y Raqa en Siria”.

50.000 civiles atrapados

La perspectiva de combates urbanos aumentó la preocupación por las decenas de miles de civiles atrapados en la ciudad.

El Consejo de Noruega para los Refugiados (NRC) estimó que aún hay 50.000, y urgió a hacer lo posible para ayudarlos a partir.

“Las familias que en los últimos meses padecieron privaciones alimentarias y sanitarias ahora corren el riesgo de verse atrapadas entre dos fuegos. Es absolutamente vital garantizarles vías seguras para salir de allí, a fin de que podamos asistirlas”, afirmó el director de NRC para Irak, Nasr Muflahi, en un comunicado.

Un habitante de Faluya contactado por teléfono por la AFP reportó haber oído fuertes bombardeos en la parte norte de la ciudad.

“Dáesh (acrónimo árabe del EI) impuso el toque de queda, que impide a la gente salir a la calle. Algunos están autorizadas a permanecer ante sus puertas”, dijo el residente.