El Gobierno de Chile negó de manera tajante que exista una base militar “ilegal” en la frontera con Bolivia, como acusó este domingo el presidente Evo Morales. Por el contrario, acusó al vecino país de mantener una instalación militar en la zona limítrofe.

Durante un acto público, Morales denunció que Chile instaló una base militar a 15 kilómetros de la frontera, cerca de las aguas del Silala, por cuya soberanía La Paz prepara un reclamo ante la corte de justicia de La Haya.

“No puedo entender por qué esta base militar que, primero, es ilegal si tomamos en cuenta los convenios internacionales. Sólo se puede instalar bases militares a 50 km de las fronteras entre países”, advirtió Morales.

A través de un comunicado, el Ministerio de Relaciones Exteriores de Chile respondió que “nuevamente el Gobierno de Bolivia busca desviar la atención de sus problemas internos con alegaciones falsas en contra de Chile”.

La Cancillería señaló que la acusación “es totalmente infundada”, pues “no existe tal supuesta instalación militar“.

“Lo que ha habido es una intensificación del patrullaje militar en territorio chileno para impedir los ataques contra civiles, robos, contrabando y narcotráfico provenientes de Bolivia, lo cual ha tenido el efecto de disminuir notoriamente esos actos delictivos”, añadió el comunicado.

Y dando un completo giro a la denuncia boliviana, el gobierno chileno acusó que “la única instalación militar en la zona del Río Silala se encuentra en el lado boliviano, apenas a 1,5 kms en línea recta de la frontera con Chile, y Bolivia debiera responder por esa presencia militar permanente en la frontera“.

Presencia militar en Cariquima

Pese a esta negativa del Gobierno, a mediados de abril BioBioChile estuvo presente en la denominada “Base Militar Patrulla Cariquima” perteneciente a la Segunda Brigada Acorazada Cazadores del Desierto, de la VI División del Ejercito.

Si bien, el Silala se ubica en la frontera con la región de Antofagasta, estas instalaciones, al menos hasta mediados de abril, se localizaban a menos de 15 kilómetros del límite boliviano en la región de Tarapacá, a dos horas de Pozo Almonte, y a 3.460 metros sobre el nivel del mar.

La base estaba dotada de alta tecnología comunicacional con enlaces satélitales e internet, y contaba con una pista de aterrizaje perteneciente para distintos tipos de aeronaves.

Según comunicó la institución, el objetivo de esta instalación es prestar todo el apoyo necesario a la comunidad aymara de Cariquima, principalmente en materia de seguridad, pues -aseguraron- antes de la llegada de militares sufrían constantes asaltos.

Cristian Núñez (RBB)

Cristian Núñez (RBB)