Pelear al título del torneo y conseguir un cupo para la Copa Libertadores 2017 serán los requisitos mínimos que el directorio de Azul Azul le solicitaría al técnico Sebastián Beccacece, quien a partir del día miércoles comenzará a definir su futuro en el club, tras la junta de los directivos, que se espera, trazará lineamientos claros para el DT.

El propósito del Carlos Heller, presidente de la concesionaria, es respaldar al argentino en la banca para que cumpla con los objetivos antes mencionados y algo más. Claro, pues desde la asociación directiva de la ‘U’, pretenden conversar con el estratega para instarlo a cambiar algunas situaciones que ciertos miembros consideran incómodas.

Uno de los puntos que genera molestia a los máximos accionistas sería la soberbia que el ex ayudante de Jorge Sampaoli en La Roja, ha tenido en su desempeño en el equipo universitario. Su actitud produjo climas de tensión entre la dirigencia, quienes le acusan de no ser escuchados ni tampoco escuchar a sus dirigidos.

Además su obstinada idea por controlar las diferentes áreas del club le han generado más de un altercado con funcionarios de la institución, entre los que se cuentan a miembros del área médica hasta sus propios colaboradores, según apunta La Tercera esta jornada.

Sin embargo, más allá de esta situación, la dirigencia espera que el director técnico revierta el pésimo rendimiento del equipo y comience a trabajar, siquiera, con un lineamiento claro, pues las 15 formaciones utilizadas en la pasada competencia no les representan. “Debe tener una idea de juego definida. Se debe convencer que la U no es la Selección. Debe adaptarse a lo que hay”, sostiene un director al citado medio.

Pese a la división que el trabajo de Beccacece genera al interior del club universitario, sus detractores saben que la continuidad del rosarino es lo más probable, pues el costo de su indemnización, que está cerca de los 800 millones de pesos, convierte en algo prácticamente imposible despedirlo del club.