Las operaciones de la coalición internacional contra el grupo Estado Islámico (EI) seguirán funcionando como hasta ahora, tras el acuerdo alcanzado por las grandes potencias sobre un cese de las hostilidades en Siria, informó un portavoz del Pentágono este viernes.
“Nuestras operaciones allí continuarán (…) ninguna actividad de la coalición va a cambiar por este acuerdo”, declaró en una rueda de prensa el capitán Jeff Davis.
La coalición liderada por Estados Unidos lleva a cabo ataques contra el EI y el Frente Al Nosra, rama siria de Al Qaeda, que son grupos excluidos de la tregua negociada por las grandes potencias, recordó el portavoz.
Davis descartó la idea que debido a este acuerdo aumentará la cooperación militar entre estadounidenses y rusos en Siria, algo que Moscú reclamaba.
Rusia y Estados Unidos pusieron en marcha desde hace unos meses un mecanismo de intercambio de información recíproca sobre los vuelos que realizan y así evitar un accidente aéreo en cielo sirio.
“No cooperamos militarmente con Rusia”, afirmó Davis. “No hay cambios al respecto”, insistió.
Al término de intensas negociaciones, Estados Unidos, Rusia y otros 15 países llegaron este viernes a un acuerdo sobre un cese de hostilidades que, de concretarse, podría ser la primera etapa en el camino del fin de este conflicto que desde marzo de 2011 causó la muerte de más de 260.000 personas.
El Grupo Internacional de Apoyo a Siria (GIAS) en Múnich, sur de Alemania, acordó también intensificar en los próximos días la ayuda humanitaria hacia las ciudades asediadas por el régimen de Damasco, los rebeldes o el EI, por vía terrestre o aérea.
El portavoz indicó al respecto que el Pentágono no tenía previsto participar en las operaciones humanitarias acordadas. “No hay discusión sobre una implicación” de militares estadounidenses “en la parte humanitaria”, expresó.
La coalición lleva a cabo desde 2014 ataques aéreos contra el EI, sobre todo en el este del país. Los rusos bombardean por su parte en todo el territorio, particularmente en el oeste del país, en apoyo directo al presidente Bashar al Asad.
