Warner tendrá que pagarlo caro por apropiarse, indebidamente, de una de las canciones más populares del mundo: Cumpleaños Feliz.

Ello se desprende de un acuerdo judicial conocido el lunes pasado, que se refería al caso de demanda que un grupo de cineastas interpuso contra Warner / Chapell, una división discográfica de Warner Music Group.

El hecho se remonta a 2013, cuandoel grupo demandó a Warner / Chapell, que iba a la caza de todas aquellas obras que incluyeran la canción, la que debían pagar por supuestos derechos de autor.

La canción fue escrita en 1893 por Patty Smith Hill, una maestra de kindergarten de Kentucky, y su hermana Mildred J. Hill, quienes la titularon Good Morning To All (Buenos días a todos).

Las hermanas la publicaron en un libro de canciones infantiles y concedieron el derecho de autor a su editorial, Clayton F. Summy Co., a cambio de un descuento en las ventas. La letra del “Happy Birthday/Cumpleaños Feliz” fue introducida posteriormente.

Warner se había esmerado en proteger los derechos de “Cumpleaños Feliz” desde 1988, cuando compró la empresa Birch Tree Group, sucesora de Summy. Sin embargo, un juez del Tribunal de Los Ángeles no encontró que haya evidencia clara para demostrar que los derechos se traspasaron a Warner.

Ante ello, determinó que Cumpleaños Feliz pase a “dominio público” por cumplir más de 100 años desde su creación, además de mandar el pago de una indemnización a Warner por todos los cobros realizados.

El caso concluyó en diciembre pasado, pero no fue hasta esta semana cuando se conocieron los detalles del acuerdo, que significó que Warner deberá desembolsar 114 millones de dólares a las personas cobradas.