Pudo tener consecuencias aún más graves, al menos así coinciden los testigos y los peritajes que realizó la Policía de Investigaciones al juego mecánico donde un tío y su sobrina salieron eyectados, hecho que los mantienen con lesiones de carácter graves.
Fue lo que ocurrió en el parque de diversiones “Felicilandia”, instalado de manera temporal en el sector de calle Apóstol Santiago con Jaime Guzmán. Hasta el lugar arribó Rodrigo Santander, de 24 años, con su sobrina Maira, de 15, quienes subieron a la máquina “Century”, mejor conocido como el de las “sillas voladoras”.
Sin embargo, la cabina se desprendió y literalmente “volaron” por casi 7 metros. El adulto fue trasladado hasta el hospital San José y la menor llegó a la ex Posta Central. La directora subrogante del recinto, Alejandra Rodriguez, detalló que esta última permanece con lesiones graves.
Un accidente que causó conmoción no solo en los familiares de las personas afectadas, sino también en los testigos y en quienes también estaban en este juego mecánico. Las críticas apuntaron contra la empresa y la falta de fiscalización.
Blanco de las denuncias ha sido la empresa, donde su administrador, Raúl Rojas, comprometió el apoyo a los lesionados, pero opinó que es “imposible” revisar cada uno de los componentes de los juegos mecánicos.
Los peritajes por este accidente los realizó el Laboratorio de Criminalística de la PDI, quienes identificaron la falla. El comisario, Patricio Vera, detalló que la soldadura estaría en condiciones deficientes.
La seremi de Salud subrogante, Marta Zamudio, aclaró que esta falla y su reparación debió ser informada a quien autoriza su funcionamiento.
A lo que apunta la Seremi de Salud es que por ser un parque itinerante los resultados de este sumario que está en curso deben ser informado a los municipios, pensando en que estos juegos mecánicos pueden instalarse en otras comunas, sea en la capital o fuera de Santiago.
