La Corte de Apelaciones de Punta Arenas había fallado contra Marco Villalta Contreras por protagonizar y huir de un accidente mientras conducía un camión Porter bajo la influencia del alcohol.

El defensor penal público Pablo Santander presentó un recurso de nulidad que fue aceptado, pues sostuvo que el motivo por el que abandonó el lugar del accidente, fue que al momento de la colisión lo acompañaba su hijo de 11 años, quien padece de problemas siquiátricos indeterminados y resultó lesionado producto el impacto.

“Durante el accidente salió del móvil y se fue corriendo a su casa. Frente a esta situación, tras de él fue el imputado, produciéndose el abandono del lugar, lo que el Ministerio Público estimó que era delito”, sostuvo Santander.

La Corte de Apelaciones resolvió anular el juicio y la sentencia por falta de fundamentación lógica en las conclusiones.

Ahora corresponde realizar un nuevo juicio con un trío diferente de jueces, luego de haber sido condenado a la pena de 541 días de presidio y la inhabilidad perpetua para conducir vehículos de tracción mecánica. Además se le condenó como autor de manejo de vehículo motorizado bajo la influencia del alcohol con resultado de lesiones graves.