Con las constantes alzas en el precio de las bencinas que afectan directamente el bolsillo de las personas, cada vez son más quienes buscan nuevas posibilidades de ahorro, además de disminuir los niveles de contaminación.

Una alternativa es el gas vehicular, que es un combustible alternativo a la gasolina, limpio, conveniente y seguro.

En 2015 se estima que sean entre 2.500 y 3.000 los nuevos autos en la industria que utilicen este combustible.

El gas, ya sea natural (GNC) o licuado en base a petróleo (GLP) es la nueva tendencia. El gas vehicular puede generar un ahorro mensual promedio de casi $120.000 respecto a un auto con bencina, para un recorrido de 250 km diarios.

Por ejemplo, usando Gas Natural, el ahorro puede llegar hasta un 40% con respecto a la bencina.

La normativa en Chile permite convertirse a gas vehicular sólo a taxis, colectivos, flotas comerciales y vehículo homologados ante el Centro de Control y Certificación Vehicular. Sin embargo, los números de autos convertidos siguen aumentando. Hoy, existen 30 millones de autos a nivel mundial que utilizan el gas como combustible.

“En este sentido creemos que hace falta un impulso mayor de la autoridad hacia permitir el acceso de más clientes a tecnologías limpias que se encuentran masificadas en muchos países en el mundo. En el caso de Perú, los vehículos a gas llegan casi al millón y en Argentina superan los 3 millones. No se entiende por qué el combustible líquido con menor carga impositiva en Chile, es decir el diésel, sea el más contaminante de todos “, afirma Manuel José Bennet, Gerente General de Autogasco.

El gas natural es mucho más sano y menos contaminante. Manuel José Bennet, comenta que este combustible emite un 80% menos de material particulado y contiene 30% menos de CO2 que su similar en diésel, es decir, el uso del gas vehicular beneficia la salud de las personas.

La conversión

Consiste en una intervención periférica en el vehículo, instalando un kit de que consiste en un juego de inyectores, vaporizados y un estanque de almacenamiento de combustible en el maletero.

Es posible realizar la conversión en vehículos de transporte público y vehículos comerciales que se encuentran certificados por un taller de conversión autorizado por el Ministerio de Transporte. Los autos no deben tener más de 5 años de antigüedad en la Región Metropolitana y 7 años en el resto de las regiones del país.

“Sería muy importante que esto se extienda por los beneficios económicos y medioambientales que pueda traer para el país y para los usuarios. Nosotros estimamos, según metodología de cálculo de la IPCC 2006, que cada vehículo convertido a gas vehicular, equivale a plantar 14 árboles al año”, explicó.

El Gas Vehicular es, en la actualidad, el mejor combustible alternativo en el campo energético, por su bajo nivel de contaminación y bajo costo. Se trata de un combustible altamente tecnológico, probado y certificado que cumple con los estándares necesarios de calidad y seguridad.