Cerca de las 20 horas del viernes, la administradora de Casa Pichara junto a su hija y trabajadoras del lugar ubicado en calle Eleuterio Ramírez, quienes se encontraban cerrando el recinto, sufrieron un asalto a mano armada.

Los delincuentes quienes se encontraban armados y a rostro descubierto, ingresaron al local comercial donde trabajan en Osorno, encañonando a la hija -de sólo 10 años- de la administradora.

Las trabajadoras del local comercial vieron la forma en que los sujetos abrieron con fuerza la cortina metálica e ingresaban con violencia, minuto en el que fueron amenazadas para que entregaran el dinero, donde la menor fue intimidada al apuntarla con el arma de fuego.

Según lo expresado fuera de micrófono por el dueño de la tienda comercial, el robo llegaría a los $3 millones, sin conocerse el paradero de los delincuentes, ya que huyeron en dirección desconocida.

Por instrucción del fiscal de turno, al lugar se trasladaron detectives de la Brigada Investigadora de Robos (BIRO).

El inspector Osvaldo Díaz indicó que los primeros pasos realizados fueron el empadronamiento a testigos y toma de declaración de las víctimas.

Asimismo, se patrulló por las inmediaciones intentado dar con los autores del hecho y para verificar qué locales comerciales tienen cámaras de seguridad para permitir conocer el actuar de los sujetos.

Sumado a ello, se investiga si la cámara de televigilancia que opera a metros del lugar -en Plazuela Yungay- administrada por Cenco registró el atraco.