Por 12 votos a favor y 7 en contra la Comisión Mixta de Presupuesto aprobó la glosa de gratuidad, luego de los cambios que le introdujo el gobierno a la iniciativa. La ministra de Educación indicó que la rebaja en un 50% del Aporte Fiscal Indirecto es un primer paso para terminar con esta política regresiva de financiamiento.

Luego de varios días de negociaciones con los parlamentarios de la Nueva Mayoría y los representantes del Consejo de Rectores, el Gobierno logró sacar adelante la glosa de gratuidad, uno de los principales pilares de la reforma educacional.

Sin embargo, este triunfo del Gobierno no estuvo exento de críticas ni cuestionamientos, incluso desde el propio oficialismo, donde la Democracia Cristiana fue la que llevó la batuta, pese a que de todas formas no se acogieron todos sus planteamientos.

Entre los principales cambios que se le hizo a la gratuidad, está la rebaja en un 50 por ciento del Aporte Fiscal Indirecto, montos que reciben las universidades por captar a los 27 mil 500 mejores puntajes de la PSU, y que el Ejecutivo piensa eliminar definitivamente por medio de un proyecto de ley, como lo detalló la ministra Adriana Delpiano.

Sin embargo, esta decisión despertó las críticas de las universidades privadas fuera del Consejo de Rectores, que calificaron como un “saqueo” esta disminución del AFI.

La diputada comunista y presidenta de la Comisión de Educación, Camila Vallejo, calificó esta indicación como un gesto político necesario para lo que será la construcción del proyecto de reforma a la educación superior.

Desde la derecha, como era de esperar, votaron en contra de la glosa de gratuidad. La senadora de la UDI, Ena von Baer, insistió en que esta es una política discriminadora y cuestionó que el Gobierno haya terminando beneficiando a un número menor de estudiantes vulnerables que los comprometidos en un inicio.

Además, entre las indicaciones aprobadas está el aumento de la beca Nuevo Milenio para el 50 por ciento más vulnerable de los estudiantes de centros de formación técnica e institutos profesionales que no entraban al beneficio de la gratuidad.

Para que esto se concrete, la instituciones deberán expresar su voluntad de transformarse en sin fines de lucro, estar acreditadas y no elevar el valor de su matrícula más allá del IPC.

Indicación que presentó algunos problemas de redacción y que el gobierno se comprometió a corregir, como lo señaló el diputado de la DC, Ricardo Rincón.

Uno de los puntos que no logró ser aprobado en la Comisión Mixta, porque no se dio la unanimidad, fue la indicación que buscaba reagrupar en una línea presupuestaria a las universidades del Estado, lo que será repuesto en la sala, como lo indicó el ministro de Hacienda, Rodrigo Valdés.

Con este primer paso, ahora la glosa de gratuidad deberá sortear la votación de la sala, tanto de la Cámara de Diputados como del Senado.