Alabado por su apasionada proximidad con la música y sus elocuentes interpretaciones, el maestro ruso Leonid Grin se apresta para iniciar su tercera temporada como director titular de la Orquesta Sinfónica de Chile. Para esta temporada 2016 aseguró querer abrir espacios a compositores nacionales, incorporar obras contemporáneas y atraer a un marco de público mayor para así “brindar música clásica para todos”.
Nacido en Ucrania, el músico europeo inició su camino musical a temprana edad, ofreciendo su primer recital de piano a la edad de 7 años, mientras que a los 11 ganó el Concurso de Compositores Jóvenes. Posteriormente, ingresó a la Escuela de Música de Dnipropetrovsk y más tarde al Conservatorio de Moscú, donde estudió composición y dirección orquestal, graduándose allí en 1977. Desde entonces su carrera ha estado marcada de éxitos.
En 2014 asumió como Director Artístico de la Orquesta Sinfónica de Chile, una experiencia que según señala, le ha traído muchas alegrías y ha significado plantear también nuevos desafíos. De este modo, bajo su batuta la programación se ha caracterizado por abrir espacios a compositores nacionales e incorporar también obras contemporáneas, siempre manteniendo un alto nivel de calidad, tanto de las composiciones, como en la interpretación. Asimismo, en este 2015 realizó sus primeras clases magistrales en el país, las que generaron un gran interés de parte de músicos de distintos rincones del mundo.
En esta nueva temporada, la del 2016, en que el conjunto que dirige celebrará 75 años de vida, los desafíos continúan. A la serie de conciertos que se extienden durante todo el año en el Centro de Extensión Artística y Cultural de la Universidad de Chile (CEAC), se suma el trabajo constante que representa cautivar a nuevos públicos y ampliar el abanico de lo que se ofrece a las audiencias.
“Creo que 2016 será mi tercera temporada feliz con esta Orquesta, que de alguna manera se convirtió en mi segunda familia. Los primeros años han sido de muchas alegrías”, expresa. “Siempre estoy pensando en mis músicos, ya sea cuando estoy en Santiago, en Filadelfia o cuando trabajo en cualquier otra parte del mundo. Desarrollamos junto con los músicos una comprensión mutua en la manera de trabajar y en los principios artísticos, lo que se confirmó a través de las numerosas cartas de agradecimiento que recibí por parte de directores invitados, internacionalmente famosos, quienes han venido a dirigir nuestra Orquesta en Santiago”.
Grin continua adelantando que “para la temporada 2016, mi objetivo como Director Artístico consistirá en atraer a un marco de público mayor. Mi deseo lo resumo en la frase: “¡Música clásica para todos!”. La idea es lograr que las personas no tengan miedo de venir a un concierto que les permitirá descubrirse a sí mismos, conectarse con la cultura del mundo. Esto es algo que enriquece la vida y el alma. Además, podrán escuchar durante toda la temporada varias obras conocidas en muchas partes del mundo, como por ejemplo el Requiem de Mozart, las Sinfonías N°4 y N°5 de Tchaikovsky, las N°5 de Beethoven, Sinfonía N°9 de Dvorak, Sinfonías N°1 y N°2 de Mahler, y “Sheherazade”, el hermoso poema sinfónico de Rimsky-Korsakov. Todos serán bienvenidos a nuestra próxima temporada y la intensión es que siempre el pà ºblico disfrute de la música”.
Uno de los sellos del trabajo de Grin, ha sido incorporar también, de manera regular en la programación, obras de compositores chilenos, algo que ha señalado, seguirá haciendo: “Me parece importante presentar en cada temporada parte de los mejores ejemplos de compositores de música chilena, de ayer y de hoy. Con respecto a este tema, estamos pensando en programar música de Lorry Alexander, Zamora y Asuar”.
