Perú realizó el primer simulacro nocturno de evacuación por el fenómeno climático El Niño, que se inició el martes y podría afectar a más de la mitad del país con desbordes de ríos en el norte y sequías en el sur con fuerte impacto en la economía.

El simulacro corrió a cargo de la Defensa Civil e involucró a 14 regiones del Perú declaradas en emergencia por el gobierno en el marco de las acciones de prevención ante los peligros que pudieran desencadenarse por la acción de El Niño.

“En 14 regiones se está produciendo el simulacro y en ellas se eligió la zona más vulnerable donde se traslada a la población a lugares seguros y a albergues temporales”, dijo el director de operaciones de la Defensa Civil, general Óscar Iparraguirre en declaraciones al canal N de televisión.

Este fenómeno El Niño será uno de los cuatro más fuertes registrados en los últimos 65 años, según la Organización Meteorológica Mundial, y Perú se ha preparado como nunca para lo cual ha provisionado el equivalente a más de 1.000 millones de dólares para 2015/2016 en trabajos de previsión.

La Defensa Civil estima que más de un millón de personas del total que vive en las regiones consideradas en riesgo resultarían damnificados en el caso de no existir planes de contigencia contra el fenómeno, que se extenderá desde fines de octubre a abril del 2016.

El ejercicio nocturno consistió en habilitar las rutas de evacuación en los casos de poblaciones cercanas a ríos que podrían desbordarse por las lluvias y causar inundaciones arrasando con viviendas, tierras y carreteras, así como de activar los sistemas de alerta temprana.

El simulacro no incluyó a Lima, donde se prevé que no habrá efectos devastadores sino una ola de calor con incrementos de la temperatura mayores a los 2 grados por encima de lo normal en los meses que durará el fenómeno que coincidirá con el verano austral.

“Ya estamos viviendo El Niño, aunque hasta ahora no se ha podido determinar si será fuerte o extraordinario”, dijo temprano el presidente Ollanta Humala durante un recorrido en la región Piura, en la costa norte peruana.

La corriente marítima El Niño produce un calentamiento en las temperaturas del océano Pacífico ecuatorial, y puede causar fuertes lluvias en algunas regiones y sequías en otras.

En Perú, pueden pasar ambas cosas: fuertes lluvias en el norte y sequía en el sur andino, complicando la producción agrícola en el país que, por prevención, dispuso la suspensión de sembradíos en zonas de riesgo y el traslado de cultivos clave, como el arroz, a sectores de la selva central donde el fenómeno no tendría mayor impacto.

En la historia reciente, Perú ya enfrentó dos intensos: en 1982-1983 causó 9.000 muertes debido a inundaciones y principalmente epidemias, y golpeó el PIB con una caída de 11,6%. En 1997-1998 se registraron 500 muertes y una caída del PIB del 6,2%.