Este martes los funcionarios del Registro Civil cumplen tres semanas de paralización a nivel nacional tras un quiebre en la mesa de negociación con la Dirección de Presupuestos, dado que los trabajadores piden un bono que -según dicen- fue prometido por el anterior ministro de Justicia José Antonio Gómez.

Ante esta movilización, la dirección del Registro Civil dispuso de oficinas para que los usuarios realizaran diversos trámites, sin embargo, éstos deben esperar bajo la lluvia y soportar bajas temperaturas durante la noche y madrugada para acceder a un número de atención.

Uno de las personas que se encontraba en la oficina de calle Manuel Rodríguez con Huérfanos explicó que llegaron a las 20:00 horas de ayer y durmieron en la calle. “Buscamos cartones y plumavit para poder pasar el frío”.

Al respecto, el subsecretario Mahmud Aleuy fue enfático en señalar que “nos parece increíble que estén en huelga, más cuando hay una negociación de todo el sistema público para el mejoramiento de las remuneraciones”.

“El país está en una situación económica donde hay que hacerle honor a lo que se denomina servicio público [...] Nosotros estamos tomando medidas que, efectivamente, son parciales y que requieren la comprensión de los ciudadanos”, indicó.

Por otro lado, el vocero de Gobierno, Marcelo Díaz, insistió en la importancia de volver a dialogar recordando que la movilización de los funcionarios es ilegal.

“Nuestra voluntad a conversar está siempre disponible y lo que esperamos es que ellos detengan esta paralización y nos sentemos a conversar. Hemos dicho, lo reafirmamos una vez más [...] Esperamos comprensión de los distintos gremios del sector público respecto a las condiciones económicas del país que obligan a una mayor austeridad en el gasto público”.

La ministra de Justicia, Javiera Blanco, reiteró que retomarán el diálogo con los funcionarios cuando depongan la paralización.