La presidencia francesa juzgó el domingo de “extremadamente preocupante y peligrosa” la actual escalada de violencia entre israelíes y palestinos.

“Se debe hacer todo lo posible para apaciguar la situación y poner fin a esta espiral que ya ha dejado numerosas víctimas”, dijo en un comunicado. Desde el 1 de octubre la ola de violencia costó la vida a 23 palestinos y cuatro israelíes.

Una mujer embarazada y su hija de dos años murieron en un ataque aéreo israelí el domingo en Gaza, según fuentes palestinas, al día siguiente de una nueva jornada de actos violentos que hacen temer una nueva intifada.

“Esta nueva degradación de la situación confirma también la urgencia de crear un nuevo horizonte político”, añade la presidencia francesa. “Francia trabaja en ello desde hace meses y no escatimará esfuerzos en este sentido”.

La espiral de violencia se inició con un ataque el 1 de octubre que costó la vida a dos colonos israelíes en la Cisjordania ocupada.