El ministro de Hacienda, Rodrigo Valdés, aseguró que la gratuidad en la educación no provocará un detrimento en la calidad de los planteles. Esto, en respuesta de una carta enviada por el rector de la Universidad Católica, Ignacio Sánchez, a la comunidad universitaria.
“Hasta ahora [...] la UC no puede adherir a esta propuesta de gratuidad. De hacerlo pondríamos en riesgo nuestra autonomía, potencial de desarrollo y financiamiento de la universidad”. Así, el rector Sánchez se dirigió a la comunidad de su plantel para hacerle llegar sus reparos a la propuesta de gratuidad del Gobierno.
Sánchez afirmó que el proyecto -inserto en el Presupuesto 2016 – “carece de una definición clara respecto de respetar la diversidad de proyectos educativos” e indica que “la gratuidad no puede ser un medio para controlar la autonomía universitaria”.
En la misiva, se enumeran una serie de incertezas y dudas respecto a los recursos para hacerla efectiva y se afirma que las universidades deberán asumir parte de los costos, “bajando para ello la calidad académica y disminuyendo presupuestos que van en beneficio del proyecto educativo de los estudiantes”.
Desde el Ejecutivo, fue el ministro de Hacienda quien respondió a los planteamientos del rector Sánchez. Rodrigo Valdés descartó que la gratuidad pueda afectar la calidad de la educación que entregan los planteles.
“Queda mucha conversación que hacer con las universidades y por cierto el debate parlamentario es la sede donde se hace esa discusión”, agregó el ministro Valdés.
Precisamente en el Congreso, el diputado DC Mario Venegas recordó que la inclusión de la gratuidad en la glosa presupuestaria es un elemento transitorio.
El diputado UDI, Jaime Bellolio, afirmó que se verá afectada la autonomía universitaria y calificó la propuesta del Gobierno como un “enjendro legislativo”.
Las universidades que cumplen los requisitos tienen plazo hasta el 22 de diciembre para sumarse a la gratuidad.
