En el Hospital Regional de Talca murió un menor de 14 años, víctima de las violentas balaceras registradas en Curicó, producto de riñas entre bandas criminales.

Johans Francisco recibió impactos de perdigones en la espalda y fue abandonado moribundo la noche del sábado por desconocidos que lo dejaron en la asistencia pública del hospital curicano.

El menor fue derivado a pabellón, donde lo intervinieron quirúrgicamente, y luego se le trasladó al Hospital Regional de Talca, falleciendo en el recinto asistencial.

Carabineros informó que esta muerte está relacionada con las constantes balaceras y ajustes de cuentas de grupos rivales que se enfrentan a balazos en la esquina de las calles Licantén con pasaje Azapa, población Prosperidad.

Además se realiza un intenso operativo para lograr identificar al autor del mortal disparo con escopeta.