Todo veinteañero comete errores. Y es que -especialmente al comienzo de esta etapa- aún no te sientes lo suficientemente adulto como para tomar decisiones demasiado meditadas, o bien, te haces más problemas por asuntos que ni siquiera valen la pena.

En este contexto, la revista femenina Cosmopolitan, formuló un listado con una serie de errores o “hábitos tóxicos” que muchos cometen a esta edad y que deberías erradicar si quieres una vida más plena.

Pon atención.

1. No ahorrar

La fundadora de la tienda online estadounidense Nasty Gal, Sophie Amoruso, dice en su libro #GirlBoss que tu dinero se ve mejor en tu cuenta bancaria que en tus pies. Y tiene razón.

En lugar de derrochar un montón de dinero en cosas que no necesitas -como una tonelada de ropa o zapatos de última moda, que después deberás desechar-, preocúpate por cuidar tu dinero.

Sobre todo si vives con tus padres aún, ahorra al menos un 15 o 10% de tus ingresos para reunir el pie de una casa u otro bien mayor. Cuando tengas 30, te darás cuenta que fue una excelente decisión.

2. Sucumbir a las drogas

Aunque probablemente lo veas como algo divertido para pasar un buen rato, sucumbir a las drogas puede arruinar tu vida. No sólo desperdiciarás mucho dinero, además verás cómo tu salud, calidad de vida y relaciones con los demás se van deteriorando, hasta que finalmente te des cuenta cuando ya sea demasiado tarde.

Hay muchas formas de pasarlo bien sin recurrir a sustancias que acaban contigo.

3. Poner a tu familia en un segundo plano

Aunque a los 20 prefieras postergar una cena, reunión o salida familiar para estar con tus amigos en una fiesta, más tarde lamentarás haberte perdido esos valiosos momentos.

No te darás ni cuenta cómo el tiempo pasará, y tus padres y familiares comenzarán a enfermarse, alejarse o incluso irse. Tus seres queridos valen más que cualquier tonta noche de juerga con amigos.

4. Fumar

Es probable que a los 20 ni siquiera notes el daño que provoca el cigarrillo en tu salud, debido a que tu cuerpo aún es joven y fuerte. Pero, cuando pasen los años y veas tu salud deteriorada, lamentarás no haberlo dejado cuando todavía podías revertir sus efectos.

5. Tomar mucho sol o ir al solarium

Exponerte a un cáncer, sólo por querer lograr un tono tostado en tu piel, no tiene mucho sentido.

Puedes conseguir ese mismo color con autobronceantes en crema o spray, sin necesidad de que tu piel
sufra un daño tan agresivo, acumulativo y muchas veces, irreversible.

6. Dejar que tus padres paguen por todo

Aunque tus padres puedan y estén dispuestos a hacerlo, no te conviertas en un mimado y trata de contribuir en lo que sea posible.

Ganar tu propio dinero en un trabajo part-time y aliviar la carga económica a tus padres, te servirá mucho en términos de madurez. Aprende desde ya a ser adulto, y valerte por ti mismo, en la medida de lo posible.

7. Evitar trabajar duro a toda costa

La vida no es siempre fácil y divertida, y debes aprender a lidiar con ella. Si el trabajo se te hace difícil, ponte desafíos, inténtalo y sigue adelante. No te rindas a la primera. Lo agradecerás cuando seas un poco mayor, y te toque enfrentar retos realmente duros.

El estilo de vida “facilista” no te llevará a cumplir tus grandes metas.

8. Mantener amistades tóxicas

Seguir una amistad con alguien que te atormenta, sólo porque con él/ella te diviertes a ratos, accedes a las mejores fiestas o simplemente por temor a alejarte de un “grupo”, es una mala jugada.

Con el tiempo te darás cuenta que tu salud mental es más valiosa que mantener un débil lazo que no aporta cosas positivas a tu vida.

Las risas ocasionales no valen la pena cuando alguien te hace sentir mal o te vuelve loco con su comportamiento.

9. Compararte con otras personas

Lo realmente importante es cómo te sientes con tu vida y tus acciones, y no lo que hacen los demás. Todos somos distintos y tenemos diferentes prioridades, por lo que lo que hace feliz a uno, a otro puede serle indiferente.

Preocúpate de ser honesto contigo mismo, abrazar tus cualidades, y luchar por lo que crees justo. Compararte con los demás sólo socava tu autoestima y te hace desaprovechar tus años felices.

Vivir el momento y pasarlo muy bien es excelente, pero descuidar el futuro puede ser un error. Cuida tu salud, ahorra y permítete madurar.