Un insólito hecho se vivió una vez concluida la final de los 200 metros planos en el Mundial de Atletismo de Beijing y que proclamó, una vez más, a Usain Bolt.

En medio del festejo un camarógrafo que se desplazaba en un ‘segway’ quiso obtener el mejor ángulo del flamante ganador, sin embargo, perdió el control y terminó atropellando al campeón mundial.

Tras el incidente, y entre risas, el campeón aseguró que trataron de matarlo, demostrando que no había ocurrido nada grave con la situación.

Por suerte para Bolt, y el camarógrafo, el hecho solo quedó en una anécdota.