La mañana de este lunes se desmontaron las torres por donde antiguamente circulaba el teleférico San Cristóbal en Santiago.

Hace seis años el teleférico fue cerrado tras una falla mecánica grave que no tuvo solución. Desde ese momento las autoridades estaban preocupados de renovar este servicio para los usuarios.

Alberto Pizarro, director de Serviu Metropolitano, explicó que se realizó “un estudio estructural que determinó que las torres están en perfecto estado de conservación y lo que se está haciendo ahora es el recambio de las estructuras electromecánicas del sistema de transporte, en las que se usará material nuevo, cero kilómetro. Además.

Junto con eso, Pizarro contó que se contarán con dos nuevas torres para reforzar el nuevo trazado. “Será un teleférico de estándar mundial para el Parque Metropolitano”.

El proyecto, cuya inversión supera los 9 mil 500 millones de pesos, busca reparar el sistema electromecánico junto con suministrar, proveer y reemplazar los elementos destinados a la operación del sistema. De las 12 torres existentes se pasará a 14 y también se remodelarán completamente las estaciones Cumbre, San Cristóbal y Oasis, las que ahora contarán con ascensores para facilitar la accesibilidad universal.

El nuevo teleférico contará con 46 cabinas con capacidad para seis pasajeros cada una, que podrán transportar a mil personas por hora. Gracias a sus asientos abatibles, se posibilitará el acceso de personas con movilidad reducida y también habrá soportes para bicicletas. Avances significativos si se compara con el antiguo teleférico -que operó entre 1980 y 2009-, que contaba con 92 cabinas con capacidad para cuatro personas y podía trasladar a 900 pasajeros por hora.