Tras hacer un llamado a la responsabilidad y serenidad de los capitalinos, el intendente de la Región Metropolitana, Claudio Orrego, dio a conocer las medidas especiales que se aplicarán para el resguardo de los asistentes a la final de la Copa América.

Un total de 500 guardias de seguridad y un plan fiscalizador especial custodiarán el Estadio Nacional. Además, se reforzará el Metro y el Transantiago, mientras que las puertas del recinto deportivo se abrirán a las 14 horas.

“Miles de argentinos han viajado a Chile para ver dentro del estadio este espectáculo. Demos una demostración de hospitalidad y civismo en el caso de producirse lo que todos queremos que es un triunfo de Chile”, indicó la autoridad gubernamental.

“Es un momento para celebrar con tranquilidad con los nuestros y de no tener ningún tipo de actitud que pueda empañar el buen comportamiento en la Copa América, que se vio reflejado con la tarjeta verde”, resaltó Orrego.

Además, el intendente recalcó que se implementará un plan especial de fiscalización a la salida del estadio para evitar la circulación de taxis y buses “piratas”. “Hemos tenido una Copa América y no queremos desteñir dentro ni fuera de la cancha en el último partido”, agregó.

Asimismo, la autoridad refirió a la mala calidad del aire que se vive en Santiago, descartando de plano alguna complicación para el desarrollo del pleito.

“Es un día especial y esperamos que las condiciones de ventilación de la ciudad mejoren y la lluvia llegue. Los compromisos internacionales Chile los cumple (…) Mañana el partido se juega cualquiera sean las condiciones atmosféricas de la ciudad”, aseguró.

Finalmente, Orrego instó a celebrar en sus casas y barrios con responsabilidad. La autoridad manifestó su esperanza de que este sábado sea un día histórico por el triunfo de Chile y no por los incidentes que se puedan generar.