Aysén sigue siendo la región más afectada por la falta de cajeros automáticos, en el marco del paro de Brinks y Prosegur, con un 95,2% de cajeros que están sin funcionar, seguido por Coquimbo, con un 34,5%. Situación previa a lo que será una de las jornadas más complejas, puesto que es fecha de pago de sueldos de muchos trabajadores.

Un 9,1% de los dispensadores instalados en lugares distintos a las sucursales bancarias se encontraban este jueves fuera de servicio, debido a la huelga que mantienen los trabajadores de las empresas Brinks y Prosegur, cifra que el miércoles alcanzó el 11%, según la información de la Superintendencia de Bancos e Instituciones Financieras.

De acuerdo a lo informado por los bancos, la situación que afecta a los cajeros automáticos responde a la falta de efectivo y problemas técnicos.

El presidente del sindicato de trabajadores de Prosegur, Hugo Muñoz, ofreció disculpas por la situación y acusó a la empresa de ser responsable de los coletazos de este paro, empresa que además pospuso para el lunes a las cuatro de la tarde la reunión que estaba citada para ayer jueves.

Recordar que los trabajadores de ambas empresas piden aumento en sus sueldos y mejores condiciones de seguridad en el transporte de valores.