No tuvo una buena acogida en el equipo económico del gobierno la petición del presidente de la Cámara Nacional del Comercio, Ricardo Mewes, de pausar algunas reformas para revertir el bajo crecimiento.

Los empresarios consideran que la salida del Arenas de la cartera de Hacienda es una posibilidad para que el gobierno tome sus propuestas y ubique en punto uno la reactivación económica.

En esa línea, Alberto Salas, presidente de la Confederación de la Producción y el Comercio, dijo tener la mejor opinión de Rodrigo Valdés y rescató su visión de la reforma laboral.

Por su parte, Mewes pidió poner el freno en algunas medidas adoptadas para recuperar el dinamismo.

El ministro Valdés confirmó el lunes en la Comisión de Trabajo que la negociación colectiva se mantiene en la empresa y que el piso no incluye el reajuste por IPC, además de que los pactos de adaptabilidad se quedan, cerrándole la puerta a la CPC en sus reparos a la reforma laboral.

Las palabras de Valdés fueron recogidas por el vicepresidente de la CUT, Nolberto Díaz, quien sin embargo lamentó las precisiones del secretario de Estado sobre la reforma, indicando que sus dichos confirman que los ministros de Hacienda responden a los intereses de la empresa.

En la Comisión de Trabajo de la Cámara Baja concordaron que la postura de Valdés sobre negociación colectiva es la misma que en su momento planteó el ministro Alberto Arenas.

Lautaro Carmona (PC), presidente de la instancia, señaló que si bien el proyecto final no es todo lo que esperaba el mundo sindical, tampoco es el original ingresado por el gobierno.

En la Alianza en tanto, siguen molestos con el avance de la agenda laboral. Nicolás Monckeberg (RN) pidió a Rodrigo Valdés corregir la propuesta, que calificó de “mala”.

El Ejecutivo habría accedido a cambios en la reforma, como establecer incentivos para que los empleados negocien con federaciones y confederaciones como los pactos de adaptabilidad mismos y mayores subsidios para la capacitación, como así también ajustar el funcionamiento de servicios mínimos a los criterios de la OIT.