Esperar un hijo puede ser una de las cosas más hermosas que vive una mujer, pero también es una de las más estresantes, especialmente para las madres que trabajan.

El embarazo puede implicar realizar algunos ajustes y cambios en la vida laboral, lo que no siempre es bien recibido por los jefes, especialmente, cuando sus empleadas deben ausentarse por varios meses.

Justamente esta reacción es la que muchas mujeres temen a la hora de dar la noticia en el trabajo. A pesar que cuentan con la ley de su lado, enfrentar al empleador e informarle del embarazo, sigue generando nerviosismo en las futuras madres.

En esto contexto, Louise Carling, experta en reclutamiento norteamericana, entregó a la revista Cosmopolitan algunos consejos que podrían ser útiles en dicho escenario.

1. Considera los riesgos

La mayoría de las personas esperan hasta cumplir las 12 semanas de gestación para dar la noticia y hablar con su jefe, sin embargo, a veces es necesario priorizar la salud de su futuro hijo, especialmente si se tiene un trabajo que pueda poner en riesgo la vida del niño (policías o químicos). Es por ello que la experta recomienda no esperar demasiado tiempo.

2. No caigas en la tentación de contarle a tus compañeros de trabajo primero

Quizás no es fácil, pero según la especialista es mucho mejor hablar con el empleador primero antes que con tus compañeros de trabajo, especialmente si se trata de una oficina que guste de los chismes. De no hacerlo, se corre el riesgo que el rumor se expanda y llegué al jefe por otra vía, lo que podría considerarse como una falta de respeto.

3. Sé valiente

A pesar del nerviosismo que puede producir, la conversación siempre debe ser cara a cara. Carling sugiere que no se realice en un lugar público ni en un “break”, sino que se agende como una cita en la oficina.

4. Ten un plan

Dependiendo del lugar donde se desempeñe, es muy útil contar con una estrategia, especialmente si se trata de un año con mucha carga laboral. Un plan sobre cómo mantener el training de trabajo normal durante los próximos meses, ayudará al jefe a preocuparse un poco menos por tu ausencia.

5. No te disculpes

No caigas en la tentación de pedir disculpas, porque la noticia de la llegada de un niño debería ser motivo de felicidad para todos. Por lo cual, mientras antes se realice esta importante conversación, antes terminará el nerviosismo y mejor será el embarazo.