El caso Penta y sus aristas siguen haciendo noticia. Pese a que Carlos Délano y Carlos Lavín, controladores del grupo Penta, dejaron la prisión preventiva y ahora cumplen arresto domiciliario, el Servicio de Impuestos Internos (SII) amplió la querella por los contratos forwards entre el holding y CB Consultorías y Proyectos S.A, firma vinculada al grupo Cruzat.

Además, en la Democracia Cristiana se vivieron días de tensión luego que Fuad Chahín desistiera de asumir el cargo de primer vicepresidente del partido, esto tras la confirmación de Jorge Pizarro como nuevo presidente. Recordemos que el senador está cuestionado porque la empresa de sus hijos emitió boletas a SQM.

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De esto y más conversó el periodista Mirko Macari en su columna semanal del programa Podría ser peor.

El director de El Mostrador comentó que la libertad de Délano y Lavín es un paso más en el proceso. “Ahora viene el morbo de saber cómo lo pasaron en esos 46 días que estuvieron en cana, cayeron del Olimpo y las vieron negras, como nunca soñaron en su vida que las iban a ver”, dijo.

“El proceso continúa. Hoy el SII amplió la querella contra Délano, Lavín y los ejecutivos de Penta por el tema de los forwards, esto no significa que esté despejado el camino judicial, es una cuestión meramente procesal. Ahora, es notable que se hayan demorado tanto ayer toda la tarde en los alegatos. Se están jugando cosas simbólicas, ninguna de las dos partes lo ven como un trámite”, agregó.

Sobre la situación de la DC, dijo que “la operación mediática de Fuad Chahín para elegir el momento exacto en el cual retirarse con todas las cámaras de televisión encima y hacer que Pizarro asuma con una bala en el ala, está muy bien pensado políticamente”.

“Él quería competir por la presidencia de la DC, finalmente se armó una mesa de unidad, no tuvo más que integrarse porque no tenía capacidad de ganar, estaba incomodo. Está sacando un buen resultado de la circunstancia, es ganancia para él salir. Sale por arriba y la mesa asume coja (…) La DC está tensionada”, añadió.

Macari también tuvo palabras para la difícil situación que vive el gobierno por las boletas que emitió el ministro Rodrigo Peñailillo a AyN, empresa de Giorgio Martelli y vinculada a una filial de SQM.

Según el periodista, declaraciones como la de Edmundo Pérez Yoma, quien expresó que “hemos entrado en un clima de sospecha” que hace necesario un cambio de gabinete, se enmarca en una estrategia de la “vieja guardia” de la Concertación. “Entienden que ya capturaron a Bachelet una vez, en su primer gobierno, ya la dejaron debilitada y se tomaron el poder, de hecho por eso fue Pérez Yoma el ministro del Interior. Nada les impide intentarlo de nuevo“, expresó.

Escucha la columna completa realizada por Mirko Macari en el programa Podría ser peor, de Julio César Rodríguez: