Las Mujeres de Blanco reaparecieron este domingo en la Plaza de la Constitución y se dirigieron a la Plaza de Armas, para realizar una nueva intervención urbana que busca “defender la dignidad de la mujer, su derecho a ser madre, a tener apoyo en su maternidad, y el derecho a la vida del que está por nacer”.

En esta oportunidad, las mujeres se reunieron en la vereda Norte de la Plaza de la Constitución, detrás del monumento a Diego Portales. Desde allí, con las cajas blancas en la mano, formaron una fila doble, que avanzó hacia el Oriente, por Agustinas. Luego subieron por Ahumada, hasta la Plaza de Armas. Allí, se dirigieron hasta la Catedral y se apostaron frente a su fachada, en semi-círculo.

Frente a la Catedral, bailarinas de la agrupación realizaron un acto. Una vez terminado, las mujeres se adentraron en la Plaza de Armas y dejaron sus ataúdes en las jardineras del lugar.

Paz Vial, directora teatral y organizadora de esta nueva intervención urbana, explicó que el acto pretendió “enfrentar, con silencio y verdad, la dictadura de la muerte. Acá hay mujeres de todos los estratos sociales y muchas de ellas han abortado y han sufrido años, en silencio. Hacemos estos actos porque sabemos que una mujer no aborta por decisión propia, aborta por abandono, por soledad, por coerción, por falta de oportunidades, por miedo. Y que mujeres decidan, desde el Estado, la muerte de nuestros hijos, en vez de jugársela por resolver los verdaderos problemas de las mujeres y de la familia, nos parece un acto de cobardía”.

Nosotras, que sabemos el dolor que el aborto provoca, que sabemos de la muerte en vida del corazón de la mujer y que sabemos y hemos sentido en nuestro vientre la muerte de nuestros niños, venimos, con humildad, en silencio, con amor y con convicción, a decir que nosotras queremos poder recibir a todos los chilenos que vengan y pedimos que se nos ayude a recibirlos. Y lo estamos haciendo antes de que nuestros pequeños ataúdes de cartón se conviertan en ataúdes de verdad”, agregó.

Asimismo, afirmó que “Chile es un país solidario, Chile sabe de sufrimientos, de desastres naturales, de dictaduras, de guerras y sabe que sólo la solidaridad nos ha sacado adelante. No dejemos que los más pobres de Chile, esos que no se pueden defender solos, sean asesinados”.

“Nosotras vamos con el corazón contrito, aterradas ante la nueva Dictadura de la muerte que vislumbramos, a pedirles a los chilenos que abramos nuestras manos, nuestros corazones y nuestras arcas y apoyemos y acompañemos a las mujeres embarazadas. Démosles oportunidades de estudios, de trabajo, para que puedan criar a sus hijos”, detalló.

“El aborto destruye a las mujeres, destruye su maternidad, su capacidad de amar, su fuerza. Nosotras queremos sacar la voz por todas esas mujeres destruidas por el aborto, y por sus hijos muertos”.

Según adelantaron, las Mujeres de Blanco seguirán haciendo intervenciones urbanas a lo largo de todo Chile y están sumando más y más mujeres que se sienten hermanas en esta lucha por defender su derecho a una maternidad digna y el derecho a la vida de sus hijos.

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