Orquesta Sinfónica de Chile celebra Semana Santa con Misa N°17 en do menor de Mozart

Orquesta Sinfónica de Chile
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La Orquesta Sinfónica de Chile celebró la Semana Santa en el Teatro del CEAC, Universidad de Chile, con un concierto dirigido por su titular Leonid Grin en que ofreció la Misa número 17 en do menor, de Wolfgang Amadeus Mozart.

La velada se completó con la Sinfonía número 25 en sol menor, del mismo compositor austríaco, la que tuvo de conductor, al director ayudante de Grin, el estudioso maestro español, Francois López-Ferrer.

Fue un concierto especial muy bien preparado en la tradición sacra-católica. Mozart compuso esta Gran Misa en 1792 en Viena, época en que el autor se dedicó al estudio Bach y Haendel. Los estudiosos de su obra señalan que por sus recursos y su dramatismo, se la considera como un antecedente del célebre Requiem y de las grandes Misas de concierto del siglo XIX, como aquellas de Beethoven y Bruckner.

La interpretación de la Filarmónica para sus cinco partes (Kyrie, Gloria, Credo, Sactus y Benedictus), contó con una aplicada dirección de Grin y la participación de excelentes instrumentistas. El Coro, conducido por Juan Pablo Villarroel, destacó por la solidez del grupo en pleno y su vibrante participación junto a las familias de vientos y cuerdas, todos al unísono, junto a los solistas.

Del cuarteto solistas, el aporte de las sopranos fue fundamental, destacando Claudia Pereira por su calidad y técnica vocales y la formalidad muy bien expresada de su coloratura. Tuvo un cometido impecable. Carolina García Valentín, en tanto, lució un poderoso caudal de voz, pasión y especial énfasis en la coloratura, aunque con tendencia a bajar su tono a uno menos agudo, pero más dulce, de mezzosoprano. Ambos varones, el tenor Rodrigo del Pozo y el bajo barítono David Gáez, cumplieron con sus roles en forma aceptable.

En lo relativo a la Sinfonía N° 25, con que se inició el programa, fue conducida con elegancia y precisión para la entrada de los instrumentos, por López-Ferrer, conocedor de la obra que no usó partitura y que manejó coordinadamente con sus músicos, principamente del segmento de las cuerdas.

Esta obra de Mozart, conocida como la “Pequeña Sinfonía”, en sol menor, ha sido considerada como “un prototipo” de la popular “gran” Sinfonía número 40, en la misma tonalidad. Compuesta en Salzburgo, a fines de 1773, tiene influencias de Joseph Haydn y del movimiento cononocido como “Sturm und Drang”.

El Concierto n° 3 de la Sinfónica de Chile, en el Teatro CEAC de Plaza Italia, se fijó para los días, viernes 10 y sábado 11, a las 19.40 horas, para conmemorar el 150 ° Aniversario del compositor alemán Richard Strauss y lo conducira el distinguido Director suizo Matthias Bamert. Consulta dos obras de Mozart: la obertura de la ópera “Don Giovanni” y la Sinfonía n° 12 para instrumentos de viento, en do menor y el poema sinfónico “Aus Italien” (“Desde Italia”), de Strauss.

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La Orquesta Sinfónica de Chile celebró la Semana Santa en el Teatro del CEAC, Universidad de Chile, con un concierto dirigido por su titular Leonid Grin en que ofreció la Misa número 17 en do menor, de Wolfgang Amadeus Mozart.

La velada se completó con la Sinfonía número 25 en sol menor, del mismo compositor austríaco, la que tuvo de conductor, al director ayudante de Grin, el estudioso maestro español, Francois López-Ferrer.

Fue un concierto especial muy bien preparado en la tradición sacra-católica. Mozart compuso esta Gran Misa en 1792 en Viena, época en que el autor se dedicó al estudio Bach y Haendel. Los estudiosos de su obra señalan que por sus recursos y su dramatismo, se la considera como un antecedente del célebre Requiem y de las grandes Misas de concierto del siglo XIX, como aquellas de Beethoven y Bruckner.

La interpretación de la Filarmónica para sus cinco partes (Kyrie, Gloria, Credo, Sactus y Benedictus), contó con una aplicada dirección de Grin y la participación de excelentes instrumentistas. El Coro, conducido por Juan Pablo Villarroel, destacó por la solidez del grupo en pleno y su vibrante participación junto a las familias de vientos y cuerdas, todos al unísono, junto a los solistas.

Del cuarteto solistas, el aporte de las sopranos fue fundamental, destacando Claudia Pereira por su calidad y técnica vocales y la formalidad muy bien expresada de su coloratura. Tuvo un cometido impecable. Carolina García Valentín, en tanto, lució un poderoso caudal de voz, pasión y especial énfasis en la coloratura, aunque con tendencia a bajar su tono a uno menos agudo, pero más dulce, de mezzosoprano. Ambos varones, el tenor Rodrigo del Pozo y el bajo barítono David Gáez, cumplieron con sus roles en forma aceptable.

En lo relativo a la Sinfonía N° 25, con que se inició el programa, fue conducida con elegancia y precisión para la entrada de los instrumentos, por López-Ferrer, conocedor de la obra que no usó partitura y que manejó coordinadamente con sus músicos, principamente del segmento de las cuerdas.

Esta obra de Mozart, conocida como la “Pequeña Sinfonía”, en sol menor, ha sido considerada como “un prototipo” de la popular “gran” Sinfonía número 40, en la misma tonalidad. Compuesta en Salzburgo, a fines de 1773, tiene influencias de Joseph Haydn y del movimiento cononocido como “Sturm und Drang”.

El Concierto n° 3 de la Sinfónica de Chile, en el Teatro CEAC de Plaza Italia, se fijó para los días, viernes 10 y sábado 11, a las 19.40 horas, para conmemorar el 150 ° Aniversario del compositor alemán Richard Strauss y lo conducira el distinguido Director suizo Matthias Bamert. Consulta dos obras de Mozart: la obertura de la ópera “Don Giovanni” y la Sinfonía n° 12 para instrumentos de viento, en do menor y el poema sinfónico “Aus Italien” (“Desde Italia”), de Strauss.