Nuevamente el gremio pesquero artesanal de la bahía de Coquimbo puso la voz de alerta y denunció la existencia de una sobrepoblación de lobos marinos que causaría pérdidas millonarias a la actividad, debido a la destrucción de redes, averías de motores y el daño causado a las embarcaciones que son enviadas a ‘pique’ por la especie, que hoy abunda.

Por legislación, los lobos de mar se encuentran protegidos por una veda hasta este año. No obstante, los pescadores insisten en la necesidad de tomar medidas a corto plazo para frenar las mermas económicas asociadas a una lucha constante que se vive cada vez que salen a la pesca de recursos.

Sobre ello, Elías Marambio, presidente electo de la Asociación Gremial de Pescadores de Coquimbo, sostuvo que “la problemática de una sobrepoblación de lobos marinos afecta a la pesca y causa la pérdida de nuestras herramientas de trabajo. Acá en Coquimbo esto es muy grave ya que poseemos una gran ensenada donde la especie tiene muchos puntos para formar loberas, aumentando su cantidad”.

“Esto ha llegado al punto de que los lobos están enviando a ‘pique’ las embarcaciones, nos rompen las mallas mientras pescamos y dañan los motores, causando pérdidas millonarias al gremio justo cuando los recursos escasean. Sabemos que existe una veda hasta este año y esperamos que de una vez por todas se nos entregue una solución”, señaló.

Ante la inquietud de los hombres de mar y una posible solución, Gerardo Cerda, encargado del Departamento de Acuicultura de Sernapesca en Coquimbo, precisó que “como sabemos está prohibida la captura y muerte de los lobos marinos por legislación, pero esa veda da la posibilidad de que en aquellos casos que existan especies ‘cebadas’, la autoridad normativa, que es la Subsecretaría de Pesca, podría autorizar la captura de aquellos lobos de los que se demuestre el daño causado a la pesca artesanal”.

Otra preocupación

Para los hombres de mar la existencia de embarcaciones varadas en la bahía de Coquimbo es otra temática que les genera problemas e incertidumbre. Principalmente el buque Don Humberto B, que en su interior posee combustible que podría causar un daño ambiental de ser derramado.

Ante ello anuncian que de no adoptarse medidas para el retiro de estas estructuras antes del mes de febrero por parte de las autoridades marítimas y regionales, el gremio se levantará en protestas. “Estamos cansados de que no tomen en serio el grave problema ambiental que ocurre en la bahía, dimos un plazo y nos movilizaremos”, señaló Elías Marambio.