El defensor del Milan Philippe Mexès tuvo literalmente su día de furia en la derrota de su escuadra 3-1 ante la Lazio, en la 20ª jornada de la Serie A italiana.

En medio del partido el francés llevó la mano al cuello de Stefano Mauri, capitán de los celestes. Una fea acción que terminó con el jugador expulsado, determinación del árbitro que enfureció aún más a Mexès.

Al ver la cartulina roja el defensor fue con todo en busca de su rival para golpearlo, ante la mirada de sus compañeros que trataban de calmar al ofuscado jugador.

Cabe señalar que Los resultados no acompañan en las últimas semanas a un Milan que ve cada vez más de lejos los puestos europeos. El entrenador Filippo Inzaghi había sido ya muy cuestionado en los últimos días y esta derrota deja su continuidad todavía más amenazada.