¿Quieres dejar de fumar? según una reciente investigación realizada por la Universidad de Montereal, el mejor periodo para dejar este nocivo hábito son los días anteriores a la menstruación. Por otra parte, el mismo estudio señaló que el momento más difícil para dejar el cigarrillo es después de ésta.

Los resultados, publicados en el Diario de Psiquiatría y encabezados por la profesora Adrianna Mendrek, son el resultado de exhaustivas pruebas experimentadas en 34 hombres y mujeres que fumaban más de 15 cigarrillos al día.

Además de cuestionarios que reflejaban el hábito de fumar, los voluntarios se sometieron a un escáner cerebral por resonancia magnética tomadas mientras la científica les enseñaba imágenes diseñadas para hacerlos anhelar un cigarro.

En el caso de las mujeres, estas pruebas se realizaron dos veces en el mes: una antes del ciclo menstrual y otra luego de este. “Estos nuestros datos nos revelan que los impulsos incontrolables de fumar son más fuertes al comienzo de la fase folicular, la que empieza después de la menstruación”, señaló la profesora Mendrek.

En tanto, la explicación de este fenómeno se aclara a través del funcionamiento hormonal femenino. “Las disminuciones de estrógenos y progesterona, profundizan el síndrome de abstinencia y aumentan la actividad de los circuitos neuronales asociadas con el deseo”, reveló la científica.

Además, el estudio informó que las mujeres fumadoras podrían tener más dificultades para dejar el cigarrillo que los hombres. “Las ratas hembras se vuelven adictas con mayor rapidez, y están dispuestas a trabajar más por la misma cantidad de dosis”, explicó Mendrek.

Sin embargo, la experta agregó que “el estrés, la ansiedad y la depresión son probablemente los factores más importantes a tener en cuenta. Una vez dicho esto, entre los jóvenes, el consumo de tabaco por las mujeres es, por desgracia cada vez mayor”.

A modo de conclusión, el equipo de investigación llamó a prestar mayor atención a la composición biológica del fumador. “Un mayor conocimiento de los mecanismos neurobiológicos que rigen la adicción nos permite orientar mejor un tratamiento personalizado con el perfil del los fumador”, finalizó la profesora Adrianna Mendrek.