El Real Madrid vivió ayer una dura derrota ante el Valencia por 2-1 que le costó el histórico invicto de 22 victorias consecutivas.

Cuando el partido se encontraba 1-1, Gareth Bale pudo haber equiparado las acciones y cambiar el rumbo del encuentro, pero tras una jugada personal erró una de las más claras llegadas del Madrid en el cotejo.

El galés, al recibir un balón, se fue velozmente por la banda en una clara contra y al llegar al área rival tuvo la oportunidad de darle el pase de gol a Benzema, pero el jugador optó por la personal perdiendo la ventaja y causando la furia del francés y de su compañero Cristiano Ronaldo.

CR7, que se encontraba a unos metros de la acción, recriminó con un claro gesto de desaprobación el egoísmo de Bale, moviendo la cabeza por el individualismo del galés.

La polémica jugada no pasó desapercibido y el error del 11 del Real Madrid le costó caro, ya que minutos más tarde Ancelotti lo sacó del campo de juego.

Al salir, el jugador no miró a su DT y cabizbajo se dirigió al banquillo.