Nueve inmigrantes clandestinos, entre ellos tres bebés, murieron ahogados el viernes frente a las costas de Marruecos en el naufragio de su embarcación neumática, anunciaron las autoridades de la ciudad de Tánger.

Una operación de la gendarmería “permitió socorrer a 21 personas y repescar nueve cadáveres, entre ellos tres bebés”, según un comunicado de la prefectura de Tánger.

Las ciudades marroquíes de Tánger y Tetuán están entre las más cercanas a Europa, y desde ellas se puede ver el continente europeo.

En junio, las autoridades marroquíes afirmaron haber “interceptado” cerca de 200 inmigrantes que intentaban cruzar el estrecho de Gibraltar con embarcaciones neumáticas para llegar ilegalmente a Europa.

A finales de mayo, al menos dos inmigrantes murieron ahogados cuando intentaban cruzar la zona de mar de unos 20 kilómetros que separa Marruecos de España. Ocho personas pudieron ser rescatadas.

Desde que empezó el año la presión migratoria ha aumentado en los enclaves españoles de Ceuta y Melilla, en el norte de Marruecos, las únicas fronteras terrestres entre África y Europa.