Miles de estudiantes se disponen a faltar a clase entre el lunes y el viernes en Hong Kong para protestar contra la decisión de Pekín de limitar el alcance del sufragio universal en la ex colonia británica.

China, que recuperó Hong Kong en 1997, anunció en agosto que el futuro jefe del Ejecutivo local sería electo por sufragio universal a partir de 2017, pero que sólo dos o tres candidatos seleccionados por un comité pueden presentarse a los comicios.

Una coalición de movimientos prodemocráticos liderada por el grupo Occupy Central hace campaña desde entonces para denunciar lo que numerosos hongkoneses consideran como un control cada vez mayor de Pekín sobre las cuestiones locales.

Aunque sin esperanzas de tener éxito, los militantes, estudiantes, empleados públicos, sindicalistas, parlamentarios y ciudadanos anónimos prometieron “una era de desobediencia civil” para tratar de influir en la posición china.

Varios miles de estudiantes de 25 universidades y escuelas superiores de Hong Kong faltarán a clase entre el lunes y el viernes de esta semana. De esta forma esperan fortalecer al movimiento democrático, cuyos líderes muy desalentados reconocieron recientemente que no tenían ninguna probabilidad de lograr que China diera marcha atrás en esta decisión.

De acuerdo con una encuesta, más de uno de cada cinco habitantes de Hong Kong podría estar dispuesto a emigrar, mientras aumenta el pesimismo sobre la independencia política de la ex colonia británica.

Este sondeo fue llevado a cabo por la Universidad China de Hong Kong, y difundido el domingo. En una escala de 0 a 10, con 0 para “extremadamente pesimista”, el promedio de las respuestas fue de 4,22.