Comienzan las Fiestas Patrias y el espíritu nacionalista aumenta. Banderas chilenas, guirnaldas, niños y niñas vestidos con el traje nacional, folklore por las calles y en todos los colegios, se siente que llega el “18″.

Sin embargo, hay compatriotas que han sentido alguna vez vergüenza de su nación.

Conocido es el caso de Marco Enríquez Ominami, quien después de haber hecho pública una declaración en esta línea quiso ser en dos ocasiones presidente de Chile.

Jose Francisco Zuñiga | Agencia UNO

Jose Francisco Zuñiga | Agencia UNO

El hecho se reveló justo en medio de la campaña presidencial de 2009. “De todos mis dolores, el que más me jode es no haber resuelto el tema de mi doble nacionalidad. Es como un sufrimiento permanente. Para mi, ser chileno es una tragedia. Si naciera de nuevo no me gustaría serlo. Hubiese preferido ser italiano”, fueron las palabras exactas que MEO dijo a Revista Cosas en 2003.

Lo más seguro es que en ese momento, Marco no pensaba siquiera en una carrera política y nunca tomó el peso a sus palabras.

Pero ante la salida a la luz de sus declaraciones, se defendió culpando al comando de Sebastián Piñera y contestando, entre otras cosas, “definamos qué es ser chileno, regalar aguas a transnacionales, o como lo entienden los conservadores, sin educación pública”.

Los dichos de MEO extrañamente aparecieron en días cercanos a las Fiestas Patrias, según consignaba el diario The Clinic en esos años.

Con un perfil más bajo, el poeta, escritor e intelectual Armando Uribe, premio nacional de Literatura y autor de más de medio centenar de libros, también confesó en 2010, sentir vergüenza de ser chileno.

Fue en el medio electrónico El Ciudadano, con 75 años de edad, frente a la pregunta: “¿Qué sentimientos lo embargan en este Chile del Bicentenario?”, que tuvo duras palabras sobre la realidad nacional.

“Este país pasó a ser otra cosa luego del Golpe de Estado. Hasta antes de la dictadura uno podía sentirse orgulloso de ser chileno, luego eso cesó y se dio vuelta al revés. Hoy siento vergüenza de ser chileno, incluso vergüenza ajena y también vergüenza propia, cosa que de ninguna manera existía, por lo menos para mí, antes del Golpe de Estado”.

Incluso, previamente a esas palabras, le habría comentado al periodista Sebastián Larraín, criticando la realidad de la Gran Minería del Cobre, “claro que ocuparse de lo que ocurre con la gran minería del cobre no empequeñece sino al revés, porque es el mayor escándalo y la mayor vergüenza por la que pasan quienes mandan en el país Chile. Y hablo no sólo de quienes mandan con poder político, sino de quienes mandan con poder económico y financiero”.

Un clásico de los avergonzados de ser chilenos, es el músico, cantautor y ex líder de Los Prisioneros, Jorge González.

Francisco Longa | Agencia Uno

Francisco Longa | Agencia Uno

Fue en Perú, después de un concierto en 2003, cuando González soltó esa frase que ningún patriota quiere escuchar: “A veces tengo vergüenza de ser chileno””.

Pero eso no fue lo único que dijo, sino que agregó ““los chilenos que vienen para acá son una mierda, yo comprendo que los odien porque son gente muy antipática, yo no sé qué se creen, son flojos y ladrones”.

Las declaraciones las realizó a Diario Correo, pero luego de eso vinieron las disculpas, que sólo ofreció al 99% de los chilenos, afirmando que la parte de “flojos y ladrones” estaba dirigida a 1% de la población nacional, aludiendo a los grandes conglomerados económicos.

“Esas empresas gigantes y prepotentes que se enriquecieron durante el gobierno militar, esa gente es floja y ladrona”, enfatizó el artista y agregó “cuando uno va a otro país y se presenta como chileno, a uno lo asocian a gente como Pinochet, que desgraciadamente es el chileno más famoso del mundo”.

De todos modos, según consignan medios nacionales de la época, como EMOL, el cantante también criticó al medio peruano por haberlo sacado de contexto.

Tampoco está demás recordar las palabras dichas por el actual ministro de Educación, Nicolás Eyzaguirre, cuando señaló a reporteros de la agencia de noticias UPI, que tener la educación más segregada de la OCDE, “nos tendría que llenar de vergüenza”.

Fue este año, que el secretario de Estado señaló molesto: “una de las cosas que a uno más le duele es cuando, junto con enorgullecerse de dónde hemos llegado como sociedad -porque hace nada éramos uno de los países más pobres de la Región y hoy día somos el líder- es que cuando se llega a educación, somos el país con la educación más segregada de todos los países de la OCDE”.

De todas formas, seguramente todos alguna vez hemos tenido motivos para sentir vergüenza de ser chilenos, como es el caso de la santiaguina Mónica Montero, quien durante un viaje a Europa, en su estadía en París, pudo constatar que el único rayado que había en la Torre Eiffel, había sido hecho por chilenos.

De eso dio cuenta BioBioChile en febrero de 2014, después que la foto en que se apreciaba la frase: “S y Mary Chile 2013″, fuera compartida más de 500 veces en Twitter.

“Fue el único rayado que yo vi. Otras personas dicen que hay más, pero yo no los vi. Al parecer hay otros en el último piso, pero en el segundo nivel es el único que destaca”, confidenció la chilena a BioBioChile.

Y sentenció: “jamás me imaginé que tendría tantos retuits, pero me alegra, ya que significa que hay mucha gente que comparte la vergüenza de encontrar algo así”.