Al menos 42 niños resultaron muertos en bombardeos aéreos perpetrados por el régimen sobre varias provincias sirias en las últimas 36 horas, indicó el domingo el Observatorio sirio de Derechos Humanos (OSDH).

La mayoría de los niños murió en las provincias de Alepo (norte) y de Idleb (noroste), precisó el director del OSDH, Rami Abdel Rahmane, agregando que varios de ellos perecieron víctimas de barriles de explosivos, un arma denunciada por esa organización.

Uno de esos barriles cayó el domingo en la ciudad de Hobait, en la provincia Idleb, matando al menos a cinco niños y cinco adultos, precisó la fuente.

En tres años y medio, el conflicto en Siria, donde la emergencia del insurgente Estado Islámico debilitó a la rebelión ante el régimen, dejó más de 191.000 muertos según la ONU y llevó a unos 9 millones de habitantes a huir de sus casa, casi el 50% de la población.