Chile se enfrenta a un entorno macroeconómico “desafiante” tras el fin del auge en el precio del cobre y las dificultades monetarias internacionales, pero está en buenas condiciones para salir airoso, estimó este martes el FMI.

“Chile se enfrenta a un entorno macroeconómico desafiante”, señaló el Fondo Monetario Internacional, destacando un debilitamiento de la inversión y una marcada desaceleración del crecimiento debido en parte al débil panorama del cobre.

Al mismo tiempo, la depreciación del peso ha impulsado la inflación, aunque se mantiene controlada, indicó la entidad financiera en un documento relativo a la visita de una misión al amparo del Artículo IV, que concluyó el 27 de junio.

Sin embargo, los expertos del Fondo “reconocieron que dados sus sólidos fundamentos económicos y marcos de política -incluyendo un tipo de cambio flotante-, Chile está en buenas condiciones para enfrentar estos retos”.

“La actual combinación de políticas macroeconómicas es apropiada, en términos generales”, concluyeron.

El gobierno chileno anunció la semana pasada una nueva reducción a su previsión de crecimiento para 2014 a 3,2%, afectado por la desaceleración económica y la baja del precio del cobre y aumentó la proyección de déficit fiscal a 2%.

El FMI mostró su optimismo al señalar que la economía chilena alcanzará un punto de inflexión en 2014 y “recuperará su nivel potencial en 2016″, impulsado por el relajamiento de la política monetaria, la depreciación del peso y la recuperación de la economía mundial.

La directora gerente del FMI, Christine Lagarde, elogió las reformas al sistema tributario llevadas adelante por el Gobierno de Michelle Bachelet, durante una reunión entre ambas en Washington a principios de mes.