Siete combatientes palestinos murieron y dos desaparecieron durante la noche del domingo al lunes en ataques aéreos israelíes contra la franja de Gaza, según un nuevo balance de los servicios de urgencias de los territorios palestinos.

Al mismo tiempo en el norte de Israel continuaron las manifestaciones violentas y fueron detenidos 110 manifestantes, según la policía israelí.

Desde la medianoche cayeron 12 cohetes en el sur de Israel, uno de los cuales hirió levemente a un soldado el lunes por la mañana y causó daños, según un comunicado militar.

En el norte de Israel se volvieron a producir episodios de violencia durante la noche tras el anuncio de que el motivo del asesinato del joven israelí que fue quemado vivo en Jerusalén podría ser político. La policía detuvo el domingo a seis jóvenes extremistas judíos por este caso.

“Alrededor de 110 personas fueron detenidas durante la noche por perturbar el orden público, lanzar piedras, destruir mobiliario urbano y atacar a las fuerzas del orden”, indicó a la AFP Luba Samri, un portavoz de la policía, principalmente en el “Triángulo”, el nombre de la región de Galilea en la que se encuentran las ciudades de mayoría árabe.

Las protestas se produjeron especialmente en Nahf y Nazaret donde, según la policía, donde los manifestantes encapuchados incendiaron neumáticos y bloquearon varias calles.

También se produjeron incidentes de este tipo en el sur de Israel y en los alrededores de Beersheva, la capital de Naguev, donde vive una importante comunidad beduina y donde fueron detenidos 12 manifestantes, según la policía.

En Hadera (norte de Israel), varios cientos de personas participaron en una marcha antiracista el domingo por la noche que se encontró con una manifestación de extrema derecha. La policía las dispersó a las dos y detuvo a 45 personas.