Tras la reciente aparición de la especie Physalia physalis -conocida como fragata carabela portuguesa- en las playas de Iquique, el intendente Mitchel Cartes junto a la Seremi de Salud, Patricia Ramírez concluyeron este lunes emitir una resolución de prohibición para la costa de la región.

Con esta medida, queda prohibido bañarse y realizar actividades recreativas a orilla de la playa tanto en Iquique como en Pisagua, a fin de evitar que alguna persona sea picada por esta especie.

“Esta es una medida de prevención y precaución para darle seguridad a las personas que se acerquen al sector costero de la región. Es nuestra responsabilidad no poner en riesgo a la población y esta resolución nos permitirá monitorear la situación en forma permanente y tomar las consideraciones necesarias”, señaló el intendente Cartes.

Cabe señalar que el intendente se reunió en una mesa de trabajo con los representantes de Sernapesca, Gobernación Marítima, Onemi, Servicio de Salud, Municipalidad de Iquique y la Secretaría Regional Ministerial de Salud para tomar la decisión a fin de proteger la salud de la comunidad.

“Si bien recién está llegando este hidrozoo a nuestras costas, tenemos que ser precavidos dada la toxicidad de este organismo, por eso se tomó esta medida preventiva que se irá evaluando día a día en la mesa de trabajo, además de reforzar el llamado a la red asistencial para que estén alertas en caso de que llegue alguna persona picada por la fragata portuguesa”, señaló la seremi de Salud, Patricia Ramírez.

Seremi Salud Tarapacá

Seremi Salud Tarapacá

Aun cuando la fragata portuguesa tiene aspecto y comportamiento similar a las medusas, se trata de un hidrozoo sifónoro, un conjunto de organismos que colaboran para su supervivencia. Su aspecto es de un color azulado y una franja roja a lo largo del cuerpo.

Si se producen picaduras, se debe actuar lo más rápidamente posible lavando la zona con suero fisiológico y aplicando compresas frías. Si no hay suero fisiológico disponible, se debe utilizar agua de mar, evitando agua dulce, ya que facilita la absorción de la toxina.

Del mismo modo, no debe realizarse raspado de la piel con arena o toallas y se debe asegurar que se han desprendido los tentáculos. Lo anterior, es porque la neurotoxina, secretada por sus tentáculos, tiene una alta toxicidad, que produce intenso dolor, problemas respi­ratorios e incluso paro cardiaco.