Los fabricantes de whisky escocés expresaron este vienes por primera vez su temor a la independencia de Escocia, porque podría privarles de los recursos de la diplomacia británica.

“En calidad de antiguo embajador, sé hasta qué punto la industria depende de un apoyo político fuerte del gobierno, ya se trate de influir en unas negociaciones en la Unión Europea o de ejercer presión a otros países para que faciliten el acceso a sus mercados”, dijo David Frost, presidente de la Asociación de whisky escocés (SWA), en la presentación de su informe anual.

Los escoceses votarán el 18 de septiembre si quieren independizarse del Reino Unido.

Los grandes promotores de la secesión, el partido nacionalista SNP -actualmente en el gobierno de la región- contempla abrir de 70 a 90 legaciones diplomáticas escocesas si triunfa el “sí”.

El Reino Unido tiene 270 misiones diplomáticas en 160 países.

“Sea cual sea el resultado del referéndum escocés, nuestra industria, que exporta a unos 200 mercados, seguirá necesitando una red diplomática eficaz”, insistió Frost.

El whisky una importante fuente de ingresos de Escocia, después del petróleo y el gas del mar del Norte.

En 2013, los ingresos de la industria escocesa del whisky fueron de 4.300 millones de libras (5.100 millones de euros), aunque las exportaciones a Asia sufrieron una caída, según los resultados del informe.

Estados Unidos sigue siendo el primer destino de las exportaciones. Las ventas a Brasil y México crecieron un 20% el año pasado.

De este modo, los fabricantes del “oro ámbar” se suman a las aseguradoras como Standard Life, a bancos como el Royal Bank of Scotland o a las petroleras Royal Dutch Shell y BP, que expresaron su inquietud por las posibles consecuencias de la independencia.

La evolución de su régimen fiscal o la salida de la UE son algunos de los temores más citados.

Las declaraciones de Frost llegan en mal momento para el SNP (Partido Nacional Escocés) y su líder Alex Salmond, que este fin de semana celebra en Aberdeen su congreso anual, último antes del referéndum.

El SNP espera que el congreso sirva para animar el voto favorable a la independencia.

Los escoceses partidarios de separarse de Inglaterra, Gales e Irlanda del Norte siguen siendo menos que los que se oponen, pero las distancias se han ido recortando.