Así como en la guerra, en el amor todo vale. Con el tiempo nos han enseñado que mientras más creativos seamos, mayor será el placer que obtengamos.
La monotonía es algo de lo que siempre queremos huir cuando estamos en pareja. Si bien al comienzo la “llama” está en su más alto nivel, luego el estrés de la rutina la hace peligrar.
Por esta razón, el manual sexual hindú “Ananga Ranga. El escenario del amor”, de Kalyana Malla, puede ser un buen aliado en la cama, según Terra.
En uno de los capítulos del libro, Malla asegura que las uñas pueden ser utilizadas para aumentar el placer, a través de rasguños eróticos.
Sin embargo, antes de practicar esto, hay que tener presente que existen 11 partes en el cuerpo sobre las que este tipo de caricias son más apropiadas: cuello, manos, ambos muslos, senos, espalda, laterales, ambas axilas, toda la zona del pecho, caderas, pubis y mejillas.
Anvartha
“Es el nombre que se da a los tres rasguños o marcas hechas con las uñas de los tres primeros dedos sobre la espalda, los senos y las partes de alrededor del pubis. Este es recomendable antes de un viaje a un país distante; sirve como recordatorio”.
Ardhachandra
“Se imprime una marca semejante a una medialuna sobre el cuello y los senos”.
Tarunabhava
“Consiste en una marca de uñas de más de dos o tres dedos de longitud sobre la cabeza, los muslos y los senos de la mujer”.
Mandalaka
“Consiste en aplicar las uñas durante algún tiempo sobre la cara hasta dejar un señal en ella”.
Churit-nakhanda
“Las uñas se aplican sobre las mejillas, labio inferior y senos de modo que no dejen marcas pero provoquen cosquilleo, hasta que el vello del cuerpo se eriza y un estremecimiento recorre los muslos de la mujer”.
Mayurapada o Pisada de pavo real
“Consiste en colocar el pulgar sobre el pezón y los cuatro dedos sobre el seno contiguo, ejerciendo una compresión con las uñas hasta que la marca semeje la huella que un pavo real deja al caminar sobre el barro”.
Cabe resaltar que las uñas deben estar limpias, sin manchas, brillantes, duras e íntegras para poder cumplir el objetivo con nuestra pareja. ¿Te atreverías a probarlo?
