Luego de que este jueves fuera detenido y trasladado a dependencias de la Interpol Chile, el ex magistrado argentino, Otilio Romano, fue puesto a disposición de la Corte Suprema durante la mañana del viernes para comenzar los procedimientos de su extradición al país vecino, donde será juzgado por crímenes de lesahumanidad durante la dictadura de Jorge Rafael Videla.

Romano es acusado de haber permitido detenciones arbitrarias, torturas, ejecuciones y de no investigar 103 denuncias por violaciones a derechos humanos en su país. En nuestro país buscó asilo político, pero el Ministerio del Interior lo rechazó en su oportunidad.

Fernando Villegas, subcomisario de la Policía de Investigaciones- Interpol, aclaró en qué consiste el proceso: el ex juez es llevado a la Corte Suprema, se notifica de ello a el Ministerio de Relaciones Exteriores nacional y su equivalente argentino, quienes deben realizar las coordinaciones pertinentes con Interpol Chile para hacer efectiva la extradición.

Este viernes Otilio Romano fue notificado, por personal del máximo tribunal del país, del cúmplase del fallo que lo remite a su país de origen.

Una vez trasladado de vuelta a su residencia en Reñaca,(que ocupa desde agosto de 2011, cuando huyó de Mendoza a nuestro país) quedará con arresto domiciliario total, custodiado por gendarmería.

Fiel a su conducta, Romano no declaró ante la prensa chilena a su salida del tribunal.

La fecha del traslado no es fija, se determina mediante coordinación de la PDI, a través de Interpol Chile, con Argentina. Pero existe un plazo máximo de 40 días para trasladar al ex juez.

Se esperan reacciones a nivel político, ya que esta extradición se planteó alguna vez bajo la reciprocidad de pedir el retorno de Galvarino Apablaza desde Argentina. Lo anterior, a pesar de que la Corte Suprema, en su fallo desestimó judicialmente tales presiones. Apablaza es acusado de ser el autor intelectual del asesinato de Jaime Guzmán y del secuestro de Cristián Edwards.