Una férrea defensa del Sistema de Protección al Contribuyente del Impuesto Específico a los Combustibles (Sipco), realizó el ministro de Hacienda Felipe Larraín, tras la importante alza en el precio de las gasolinas.

Diversas críticas surgieron a propósito del última alza en el precio de los combustibles, que subieron en promedio unos $18 pesos por litro alcanzando precios históricos en el país. Esto provocó de inmediato los cuestionamientos al Sipco, especialmente desde el sector de los transportistas, que se mostraron molestos con lo sucedido, agregando que la reciente la activación del mecanismo por parte del Ministerio de Hacienda no sirvió para frenar los aumentos de esta semana.

Al respecto, el administrador de la billetera fiscal aseguró que el SIPCO “nunca se planteó como un mecanismo de subsidio de forma permanente a los combustibles”, sino como un instrumento para suavizar los precios, sobre todo a transportistas, cuando el valor del crudo aumenta a nivel internacional.

Según el secretario de Estado, el Sipco “se planteó como mecanismo para suavizar alzas, tal como fue el Fepco y tal como fue el Fepp que operan desde 1990. La diferencia importante es que nosotros estamos haciendo esto de manera más eficiente porque sólo estamos suavizando los precios para los transportistas y para los automovilistas y no para los que lo usan para fuentes fijas”.

Sobre un cambio o derogación del impuesto específico, Larraín indicó que para llegar a eso habría que actuar responsablemente aumentando la recaudación de impuestos desde otros ítems, ya que actualmente se recogen 2 mil millones de dólares gracias al específico.

“Nosotros hacemos todo lo que está de nuestra parte, entendiendo que el gobierno no puede pretender manejar los precios internacionales. Hemos intervenido a través del mecanismo que ustedes conocen (Sipco), cuando se ha podido, de forma transparente de acuerdo a los márgenes que nos da la ley, pero eso es lo que por el momento podemos hacer”, estimó.

Por último, Felipe Larraín aseguró que no perciben algún riesgo de tener un aumento en los insumos principales de la canasta familiar producto del alza histórica de las bencinas.

“La inflación va a estar contenida dentro del rango del Banco Central y probablemente en la parte más baja del rango, es decir entre 2% y 3%”, indicó.

Recordemos que mediante cambios en los parámetros del Sistema de Protección al Contribuyente del Impuesto Específico a los Combustibles (Sipco), el Ministerio de Hacienda evitó la semana pasada que las bencinas registraran un precio récord, el cual rebajó en $20 por litro el impuesto específico.

La semana pasada el mecanismo volvió a operar pero estabilizó el precio en sólo $7. Econsult revisó su estimación de impacto del Sipco, apuntando que el precio de la bencina experimentaría un alza sobre $20, en lugar de los $12 anteriormente proyectados.